«Se ha hecho justicia». Con esas palabras Barack Obama anunció a su país al filo de la media noche -5.35 de la madrugada en España- que las fuerzas especiales estadounidenses mataron ayer a Osama Bin Laden. No fue en una cueva de Afganistán sino en una impresionante mansión construida a medida para hacerle de fortaleza en Abbottabad, a 56 kilómetros de la capital pakistaní.
¿Se podrá creer? :023: