Por... GERMAIN MOYON
NUEVA YORK -- La amenaza de una brusca caída similar al “crack súbito†que descalabró a Wall Street hace un año sigue planeando, pese a las medidas de salvaguarda adoptadas desde entonces por el gobierno estadounidense, afirman los expertos.
La suma de eventos del 6 de mayo del 2010 que desembocaron en una súbita caída de cerca de 10% del Dow Jones, seguida de una remontada casi igual de rápida, fue detallada cinco meses despuíés en un informe de los reguladores de los mercados financieros, la SEC y la CFTC.
“Asistimos a dos eventos: un sismo y luego un maremotoâ€, resumió James Angel, profesor de finanzas de la universidad de Georgetown.
El “sismo†fue una transacción masiva lanzada por un administrador de acciones: la venta de $4,000 millones en títulos financieros asociados al índice bursátil Standard & Poor’s 500. La operación se realizó informáticamente en un breve lapso, en un momento en que los mercados ya estaban muy sensibles por las dificultades presupuestarias de Grecia.
Entonces ocurrió un “maremoto†que sumergió a los mercados bursátiles: la transacción provoca operaciones automáticas de venta. Operadores superados por los hechos se retiran de los intercambios. Algunos títulos son suspendidos en el New York Stock Exchange, pero no en algunas plataformas electrónicas. La falta de liquidez llevó a movimientos extremos, con algunas acciones cayendo a cero.
Rápidamente “quedó claro que había un problema tíécnicoâ€, recuerda Kenneth Polcari, operador de ICAP Equities en el New York Stock Exchange.
Para íél, este tipo de crack súbito “podría reiterarseâ€, pese a que las medidas adoptadas desde entonces reducen esa posibilidad.
“La SEC instaló un sistema de ‘corto-circuito’ que se aplica a todas las plataformas de operaciones y no solamente a aquíéllas donde actúan seres humanos, lo que había sido el origen del problemaâ€, explicó.
Tras esta sesión loca, el controlador bursátil, inquieto de ver a los inversores individuales desertar de Wall Street, reaccionó rápidamente. Desde junio, instaló “corto-circuitos†que provocan una suspensión de las acciones que caen 10%, para los títulos más negociados.
Estas medidas fueron luego ampliadas y ajustadas, hasta la presentación a comienzos de abril de un sistema más complejo que registra la evolución de los títulos y prevíé pausas en las operaciones en caso de algún movimiento brusco.
Para Joe Mecane, uno de los responsables del operador bursátil NYSE Euronext, las medidas adoptadas permitieron “avanzar muchoâ€.
“Creamos un ambiente fragmentado y competitivo, con numerosos mercados diferentes relacionados entre sí, que funciona bien el 99% del tiempo, pero una de las lecciones (del crack súbito) es que esos nexos, sobre todo en un momento de tensiones, no siempre funcionan tan bien como en períodos normales. Herramientas como cortacircuitos constituyen una forma de reunir la liquidez y asegurarse de que las diferentes plataformas interactúenâ€, estimó.
La SEC tambiíén adoptó medidas para impedir a ciertos operadores poner órdenes ficticias (destinadas a ser anuladas), que habían perturbado los intercambios el 6 de mayo de 2010.
“La principal lección sacada es que el mercado reúne a numerosos agentes informatizados, y que cuando esos programas interactúan, se obtiene una actitud imprevisible, incluso irracionalâ€, consideró Ciamac Moallemi, profesor de la Columbia Business School.
De todas formas, para James Angel un nuevo crack “llegará en algún momentoâ€.
“Los aviones son el medio de transporte más seguro, pero cada tanto se cae unoâ€, explicó, agregando que es un evento que funciona como “un buen llamado de alertaâ€.