Mubadala, un fondo del Emirato árabe que invierte en empresas tecnológicas, podría culminar su desembarco definitivo en la firma vasca por 500 millones de euros en las próximas semanas.
Mubadala, el fondo promovido por Abu Dhabi para diversificar su economía y rebajar su dependencia del petróleo, podría cerrar en las próximas semanas la adquisición del 71% de Aernnova, la mayor compañía aeronáutica española. El país árabe se hará con una participación que pertenece a la antigua Caja Castilla- La Mancha, CCM (23%), Espirito Santo (26%), Isolux (11%) y el banco de inversión EBN (11%).
El 29% restante seguirá en manos del actual equipo directivo, con su presidente Ignacio López Gandásegui a la cabeza. “Quedan flecos pendientes, pero la venta está ya cercanaâ€, apuntan a EXPANSIí“N fuentes próximas a la operación, que tambiíén indican que “la negociación ha pasado por altibajosâ€.
La compra, cuyo volumen rondaría 500 millones, tiene una doble lectura. Desde un punto de vista empresarial, tanto el emirato abudabí, como los socios vendedores y la compañía vasca, podrían salir beneficiados. Políticamente, el desembarco del fondo árabe es un asunto delicado, ya que Aernnova opera en un sector que el Gobierno de Zapatero subrayó en rojo como paradigma del cambio de modelo económico.
Subvenciones
Aernnova ha recibido de Industria príéstamos sin intereses por valor de 129 millones para respaldar sus contratos con el avión A350 de Airbus. Sus filiales en Castilla-La Mancha y Andalucía tambiíén han sido objeto de numerosas subvenciones por parte de los Ejecutivos regionales.
Ahora bien, ¿por quíé se interesa Abu Dhabi en este grupo español? En la última díécada, Mubadala –que es patrocinador de la escudería Ferrari– ha forjado un clúster aeronáutico que suma un negocio de 1.000 millones de euros y que tiene presencia en todas las ramas del sector, como el mantenimiento de aeronaves militares, los servicios de leasing de componentes de aviones para aerolíneas, la formación de pilotos e, incluso, la fabricación de aeroestructuras en fibra de carbono (la actividad en la que es más fuerte Aernnova).
En paralelo, en 2006, se hizo con el 31,6% de Piaggo Aero, fabricante italiano de jets, por un importe no revelado. Tambiíén ha cerrado acuerdos con los gigantes del sector, como Airbus, Sikorsky, Lockheed Martin o General Electric. La compra de Aernnova no sólo le permite incrementar su negocio en un 40%, sino que le abre aún más las puertas como proveedor de primer nivel de EADS, junto a otros clientes como Boeing o la canadiense Bombardier.
Tambiíén hay claras ventajas para los vendedores y para el presidente de Aernnova, López Gandásegui. El directivo seguirá al frente de la gestión de la compañía y mantendrá el mismo porcentaje accionarial. Sin embargo, cambia a unos socios golpeados por la crisis por otro que, además de aportar capital, le permite entrar en un emergente polo aeronáutico.
Aernnova estaba en un momento de transición. En sus cuentas de 2009 (últimos datos conocidos), su facturación había retrocedido más de un 20% (de 490 a 378 millones), y su beneficio había pasado de 5 a 2 millones. En paralelo, su deuda se situó en 320 millones. La entrada del emirato le da oxígeno para seguir con su hoja de ruta, que pasa por reforzar su capacidad industrial en el exterior (ya tiene dos plantas en Míéxico y otra en Rumanía).
Socios
CCM, por su parte, fue un aliado estratíégico para Aernnova, con la bendición del Gobierno de Josíé María Barreda. Cuando Gamesa se deshizo de su división aeronáutica en 2006 y López Gandásegui lideró una oferta para hacerse con la filial, esta entidad prestó el respaldo financiero y se hizo con el 23%. Aernnova se valoró en 370 millones (45 millones para la compra más una deuda de 325 millones). CajaAstur, propietario de CCM, gestiona la operación de venta, pero su importe iría destinado al Fondo de Garantía de Depósitos.
Por último, fuentes del Gobierno vasco aseguran a EXPANSIí“N que Aernnova ha informado de forma regular sobre el estado de la negociación. “La situación para Euskadi no cambiará tras la entrada de Abu Dhabi, ya que el capital vasco en la empresa seguirá siendo el mismoâ€. Pero en Castilla-La Mancha no podrán decir los mismo. La entrada de CCM fue un impulso para la instalación de la factoría en Illescas (Toledo), donde tambiíén se sitúa el centro de excelencia de fibra de carbono de Airbus. El socio árabe comparte ese objetivo: impulsar un gran polo aeronáutico. Pero en Abu Dhabi.
Operación singular
A diferencia de otras operaciones, Abu Dhabi quiere desarrollar su tejido empresarial con el ‘know how’ de firmas como Aernnova.
En el caso de Mubadala, sus compras no sólo canalizan inversiones, sino que su reto es diversificar la economía del Emirato.
China, Abu Dhabi y Qatar han invertido casi 19.000 millones en grupos españoles como Telefónica, Cepsa o NH Hoteles.