La economía de Australia sufrió entre enero y marzo la mayor caída en veinte años debido a que las inundaciones que sufrió el país ha hundido las exportaciones. El PIB del país se redujo un 1,2% respecto al trimestre anterior, cuando creció un 0,8%, según los datos publicados hoy por la oficina de estadísticas. Las exportaciones australianas cayeron un 8,7% y restaron un 2,1% al crecimiento del PIB, mientras que el gasto en maquinaria y equipamiento se elevó un 6% y sumó un 0,4%.
Los sectores más afectados y que más influyeron en la contracción del PIB fueron la minería y la agricultura, que cayeron un 6,1 y un 8,9 por ciento, respectivamente, mientras que las manufacturas descendieron un 2,4 por ciento.
Es el primer resultado negativo del PIB desde el último trimestre de 2008, en plena crisis financiera internacional, cuando se registró una contracción de 0,9 por ciento, y del peor retroceso desde el primer trimestre de 1991 cuando la economía australiana cayó un 1,3 por ciento.
"La contabilidad nacional de hoy nos demuestra el enorme impacto que tuvo en la economía las extensas inundaciones y la actividad de los ciclones a principios de año", dijo el tesorero federal de Australia, Wayne Swan, en declaraciones a periodistas en Camberra citadas por la agencia local AAP. "Esperábamos recibir un gran golpe, y así ha sido", añadió Swan.
El tesorero se mostró confiado en un "fuerte rebote" del PIB en el siguiente trimestre de junio cuando se mitigue el impacto de los desastres y la minería recupere sus niveles de producción