De lo instantáneo a lo eterno.El tiempo cuántico, universo y mente,inteligencia megaversal.
http://starviewer.wordpress.com/2010/01/22/de-lo-instantaneo-a-lo-eterno-el-tiempo-cuantico-universo-y-menteinteligencia-megaversal/Las unidades de tiempo cubren desde los episodios más efímeros, hasta duraciones interminables. Las descripciones que seguidamente ofrecemos, tratan de dar idea de este vasto abanico cronológico.
1.-Un Attosegundo: (10^-18 segundos. Una trilloníésima de segundo). Los fenómenos más fugaces que la ciencia puede cronometrar, se miden en attosegundos. Con láseres de alta velocidad muy perfeccionados,, se han emitido destellos luminosos de tan solo 250 attosegundos. Aunque tal duración parezca inimaginablemente corta, es toda una eternidad si la comparamos con el tiempo de Planck (alrededor de 10^-43 segundos) que constituye, de momento, la más breve duración posible conocida: El instante Planck.
2.-Un Femtosegundo (10^-15 segundos) Una milíésima de billoníésima de segundo. En las molíéculas, los átomos realizan una oscilación individual completa en tiempos de 10 a 100 femtosegundos. Las recciones químicas más rápidas requieren, por lo general, centenares de femtosegundos. La interacción entre la luz y los pigmentos de la retina-El proceso que permitiría la visión-invierte alrededor de 200 femtosegundos.
3.-Un Picosegundo: (10^-12 segundos, una billoníésima de segundo). Porejemplo, los transistores más rápidos, operan en picosegundos. El quark “fondoâ€, partícula subatómica “raraâ€, creada en aceleradores de partículas, tarda un picosegundo en desintegrarse. A temperatura ambiente, la vida media de un enlace de hidrógenoentre molíéculas de agua es de tres picosegundos.
4.-Un Nanosegundo (10^-9, una millardíésima de segundo). Un rayo de luz que viajase por el vacío avanzaría sólo 30 centímetros en este tiempo. El microprocesador de un ordenador personal tarda entre dos y cuatro nanosegundos en ejecutar una instrucción individual, como la apertura de un proceso. El mesón K, otra partícula subatómica rara, tiene una vida de 12 nanoegundos.
5.-Un Microsegundo (10^-6, una milloníésima de segundo) En este tiempo, el rayo de luz habría recorrido 300 metros, mientras que a nivel del mar, un sonido se habría propagado un tercio de milímetro.
6.-Un Milisegundo (10^-3, una milíésima de segundo). El tiempo de exposición más breve de una cámara fotográfica de alta definición Una mosca bate las alas una vez, cada 3 milisegundos, y una abeja cada 5.
7.-Una díécima de segundo. Literalmente un “abrir y cerrar de ojosâ€. El tiempo que necesita nuestro oído para discriminar entre el sonido natural y el eco. El tiempo en el que un aetherofacto, avanza 200 metros, cuando inicia su aceleración cuántica instantanea. En ese tiempo, un colibrí puede batir sus alas siete veces.
8.-Un segundo: La luz recorre 300.000Km en este tiempo: Es la duración de 9.192.631.770 ciclos de radiación producida por un átomo de cesio 133.
Si tomamos estas referencias, podemos darnos cuenta, que por ejemplo, percibimos las frecuencias del tribanda de nuestro diferencial K-G en un Nanosegundo, mientras que el sonido que lo envuelve, tarda en llegarnos una milíésima de segundo. Ello implica necesariamente que nuestra mente, literalmente, genera una sensación de intemporalidad, de parada del tiempo, en el momento que nuestras emociones y recuerdos, de años, aparecen súbitamente como si fuera un sólo instante. (Por ejemplo cuando una combinación de frecuencias nos evocan recuerdos superpuestos del presente, del pasado y del futuro).
Si analizamos la antigí¼edad del Universo conocido, 13.700 millones de años, nuestra vida, apenas supone un Attosegundo, respecto al tiempo cósmico, y en ese contexto, para el observador inteigente “universoâ€, tan solo seríamos apenas un imperceptible destello luminoso de un laser.
Nuestra civilización como seres inteligentes en la Tierra, apenas un Femtosegundo respecto de tiempo cósmico. (El tiempo que tarda un átomo en realizar una oscilación individual completa es de 10 a 100 femtosegundos).
La vida en la tierra, apenas una díécima de segundo, respecto al tiempo cósmico. Un abrir y cerrar de ojos, respecto de la consciencia del universo, como ente inteligente.
Si tomamos como referencia la teoría megaversal, nuestro Universo, igualmente podría estar contenido en otro megaverso, del que íéste fuera una parte de otra parte, e incluso en el conjunto de la realidad de otros multiversos, del que el nuestro únicmente constituiría una rodaja de pan de molde, respecto de un gigantesco almacíén repeto de Panes de molde, que a su vez sería parte integrante de otra realidad megaversal en la que se contiene.
De esta forma, nuestro universo, únicamente sería un attosegundo, respecto del Gran Megaverso inteligente.
Cada vez que sintamos la tentación de creernos los más inteligentes del universo, el centro del mismo o los poseedores de la razón cartesiana, tal vez, debamos darnos cuenta que la física cuántica diferencial y la exociencia nos llevan a una conclusión científica incuestionable: “La existencia de una grandiosísima y compleja inteligencia de la que formamos parte inexorble, y de la que somos apenas un attosegundo de su tiempo cuantico.â€