â– La economía crecerá entre un 2,7% y un 2,9% este año
â– En abril, este rango se situaba entre el 3,1 y el 3,3%
â– Bernanke no ha tomado aún ninguna decisión sobre más compras de activos
Los últimos datos económicos de Estados Unidos revelan que la recuperación se ha frenado en los meses más recientes y así lo ha confirmado este miíércoles la Reserva Federal. El organismo ha revisado sus previsiones de cara a los dos próximos años y sus conclusiones dibujan un panorama más bien sombrío, con menos crecimiento y más paro.
No obstante, el guión sigue según lo previsto y, tras anunciar que mantiene los tipos entre el 0 y el 0,25%, la institución ha ratificado el fin del programa de recompra de bonos por importe de importe 600.000 millones de dólares (430.000 millones de euros) a finales de mes, si bien ha recordado que mantendrá su actual política de reinvertir los principales beneficios de su cartera de valores.
¿La debilidad económica podría justificar un nuevo plan de estímulo? Durante su comparecencia, el presidente de la Fed, Ben Bernanke, ha anunciado que aún no ha tomado ninguna decisión sobre más compras de activos. Eso sí, ha dejado claro que cuando se anunció en agosto de 2010 el último programa de recompra de bonos, conocido como 'Quantitative Easing 2', la situación era "muy diferente" a la actual, ya que la inflación era más baja.
Asimismo, ha explicado que cuando la Fed señala que los tipos de interíés se mantendrán en el actual nivel durante un "periodo prolongado" de tiempo indica que permanecerán sin cambios durante "al menos" las dos o tres próximas reuniones del comitíé.
Menos crecimiento y más paro
Bernanke incide en que la ralentización en la recuperación económica observada por la Fed es "temporal", pero añade que tambiíén parte de ella podría ser más "duradera".
En este sentido, insiste en que la economía estadounidense "se enfrenta a vientos en contra que quizás sean más fuertes y mas duraderos de lo que inicialmente se preveía", de ahí que la institución haya reducido sus previsiones de crecimiento.
Por segunda vez este año, la institución ha rebajado la estimación de PIB, según la cual la economía crecerá en 2011 entre un 2,7 y un 2,9%. En abril, el rango se situaba entre el 3,1 y el 3,3% y en enero, entre el 3,4 y el 3,9%.
Asimismo, ha recortado tambiíén su previsión para 2012 en un rango de entre el 3,3% y 3,7%, frente al entre 3,5% y 4,2% de la estimación de abril. De cara a 2013, la institución presidida por Bernanke mantiene su previsión de crecimiento del PIB de entre el 3,5% y el 4,2%.
Menor crecimiento implicará tambiíén una díébil creación de empleo así como una tasa de paro más elevada. En este sentido, la institución ha empeorado su previsión sobre la tasa de desempleo para este año y cree que se situará entre el 8,6% y el 8,9%, frente al rango de entre el 8,4% y 8,7% de la reunión anterior. En este línea, ha modificado ligeramente al alza su previsión para 2012, desde entre el 7,6% y el 7,9% hasta entre el 7,8% y el 8,2%, y para 2013, desde entre 6,8% y 7,2% hasta entre el 7% y el 7,5%.
La Fed tambiíén ha acotado su previsión de inflación para este ejercicio hasta un rango de entre el 2,3% y el 2,5%, frente a la anterior estimación de entre el 2,1% y el 2,8%, pero, en cambio, espera que en 2012 siga dentro de sus objetivos, al estimar que será de entre 1,5% y el 2%.
Grecia, amenaza para el sistema financiero
Respecto a la situación en Grecia, Bernanke ha reconocido que la situación por la que atraviesa el país es "complicada", pero ha incidido en la importancia de resolver sus problemas económicos, ya que representan una amenaza tanto para el sistema financiero mundial como para el sistema financiera europeo y su "unidad política".
En este sentido, Bernanke ha recalcado que una quiebra de la economía griega o de cualquier otro país europeo enturbiaría los mercados financieros y afectaría a Estados Unidos, aunque ha incidido en que los bancos regulados por la Fed no están significativamente expuestos directamente a los problemas de Grecia.