La compañía aíérea rusa Aeroflot será una de las empresas controladas por el Estado que serán privatizadas en los próximos 3-5 años, anunció hoy el viceprimer ministro y titular de Finanzas ruso, Alexíéi Kudrin.
"En los próximos 3-5 años el Estado prácticamente debe desprenderse de los paquetes (de acciones) de control de todas las compañías clave de las que es propietario", dijo el jefe de las finanzas rusas en su intervención en el Foro Renaissance Capital, según la agencia Interfax.
Indicó que el proceso de privatización abarcará "el sector financiero, el sector petrolero, las telecomunicaciones, las compañías de transporte, empezando por (la naviera) Sovkomflot, Aeroflot, y otras".
Kudrin precisó que en los próximos tres años el Estado ruso planea ingresar cerca de 30.000 millones de dólares por concepto de privatizaciones, que se refieren a la venta de las acciones de las empresas que ya fueron incluidas en el programa gubernamental.
"El próximo paquete (de privatizaciones) será entre un 25 y 50 por ciento mayor. Todo dependerá de la valoración que aún debe hacerse", dijo el titular de Finanzas.
El pasado día 17, el presidente de Rusia, Dmitri Medvíédev, abogó por la reducción del papel del Estado en la economía del país y la potenciación de la iniciativa privada como motor de crecimiento, en una intervención en el Foro Económico Internacional de San Petersburgo.
Medvíédev manifestó que Rusia vivió un etapa de desarrollo vinculado al fortalecimiento del papel del Estado en la Economía, que calificó de "inevitable" y "en determinado momento necesaria", pero recalcó que "el potencial de esa vía se agotó".
Agregó que el predominio de las empresas controladas por el Estado supone una amenaza para la economía.
Señaló que el Gobierno ruso, que encabeza el primer ministro, Vladímir Putin, debe ampliar sus "muy modestos planes de privatización" de grandes compañías antes del 1 de agosto próximo.
"El Estado no necesita un volumen tan grande de propiedad", recalcó Medvíédev, quien consideró fundamentada la renuncia a los paquetes de acciones de control, incluso, con poder de bloqueo, de muchas grandes compañías estatales.
Explicó que se requiere un enfoque más cauteloso sólo en relación a los monopolios de infraestructuras y a empresas necesarias para garantizar la seguridad militar del Estado.
"Estoy seguro de que podremos llevar a cabo las privatizaciones de acuerdo con reglas modernas y transparentes, a fin de captar inversores eficaces y reunir mayores recursos para el presupuesto ruso", enfatizó el jefe del Kremlin