La Guardia Civil registra la sede de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) en Madrid en una investigación sobre desviación de fondos y apropiación indebida en una operación ordenada por la Fiscalía Anticorrupción, que lleva dos años investigando estos presuntos delitos.
Fuentes de la investigación señalan que "por el momento" no ha habido detenciones, aunque los agentes del Instituto Armado tienen orden de detener al presidente de la SGAE, Teddy Bautista, y otras dos personas más. Tambiíén es posible que la operación se extienda a otras sedes de la Sociedad.
No obstante, desde la SGAE niegan el registro y aseguran que no se ha producido ninguna detención. "Teddy Bautista está reunido con el responsable de Comunicación analizando los resultados de las elecciones. Se encuentra, como todas las mañanas, en nuestras oficinas", han asegurado a ELMUNDO.es.
La sede de la SGAE permanece cerrada a cal y canto. Tres vehículos de la Guardia Civil están situados en la confluencia de las calles Fernando VI y Pelayo y numerosos periodistas se han congregado a las puertas del emblemático edificio, el Palacio de Longoria.
A primera hora de la mañana, los agentes desalojaron del edifio a personas ajenas a la sociedad. A las 12 horas, además, han permitido abandonar el edifico a algunos trabajadores, según informa Elena Mengual e Irene Moreno.
Supuesto desvío de fondos
La Fiscalía Anticorrupción presentó en la Audiencia Nacional una denuncia dirigida contra la SGAE por un supuesto desvío de fondos en sus actividades, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.
El escrito del Ministerio Público, que fue presentado hace unas semanas ante el Decanato de la Audiencia Nacional, responde a unas diligencias previas abiertas por este departamento a raíz de una denuncia que presentaron en noviembre de 2007 la Asociación de Internautas, la Asociación de Usuarios de Internet, la Asociación Española de Pequeñas y Medianas Empresas de Informática y Nuevas Tecnologías (APEMIT) y la Asociación Española de Hosteleros Víctimas del Canon(VACHE).
La denuncia, a la que tuvo acceso Europa Press, se basaba en la aparición en varios medios de comunicación de varias "supuestas ilicitudes cometidas en la gestión económica de los recursos de la SGAE".
Los internautas denunciaban que los directivos de la entidad habían formado una trama societaria de empresas filiales en torno a la Sociedad Digital de Autores y Editores (SDAE) en las que las cantidades recaudadas en concepto de gestión de derechos de autor se invertían en actividades lucrativas para las mismas.
Según estas asociaciones, la entidad denunciada incumplía, de esta forma, "el mandato legal que le exige que el reparto de los derechos recaudados se efectúe equitativamente entre los titulares de las obras o producciones utilizadas, pues supuestamente se estaría destinando dicha recaudación a mantener empresas privadas, que lo son de sus socios y que además envuelven un ánimo de lucro prohibido expresamente por ley".
A su juicio, estas actividades podrían ser constitutivas de los delitos de apropiación indebida, estafa y fraude de subvenciones que serían achacables a los responsables de las empresas que habrían llevado a cabo la "malversación" de sus recursos económicos y, de forma subsidiaria, al Ministerio de Cultura, como "principal fiscalizador de este tipo de asociaciones".