SEATTLE -- El presidente Barack Obama pidió una vez más a la Boeing Co. y sus obreros que solucionen su desacuerdo laboral sin "perder mucho tiempo en los tribunales".
La disputa impide a la firma aeronáutica producir sus aviones en una nueva planta que montó en el estado de Carolina del Sur, donde los sindicatos tienen mucho menos peso y los salarios son más bajos.
En una entrevista que concedió a la televisora KING-TV, se le preguntó al mandatario por la demanda que presentó la Junta Nacional de Relaciones Laborales (NLRB, por sus siglas en inglíés) contra la empresa por su empeño de trasladar a Carolina del Sur gran parte de la producción, que en la actualidad se hace en Seattle. El presidente volvió a repetir que "las empresas deberían poder afincarse donde prefieran operar".
Sin embargo, Obama destacó que Estados Unidos "compite con gente de todo el mundo que buscan nuestros empleos y nuestros negocios y nuestra participación en el mercado".
"No podemos darnos el lujo de tener a las empresas y sus obreros discutiendo en lugar de unirse para producir los mejores productos posibles y venderlos lo más competitivamente posible", afirmó.
La NLRB sostiene que Boeing tomó represalias contra su plantilla laboral agremiada en el estado de Washington al construir una planta que producirá su nuevo modelo 787 en Carolina del Sur, debido a sus ventajas fiscales, laborales y la flexibilidad del ordenamiento laboral. En ese estado no es obligatorio que los obreros pertenezcan a un determinado sindicato para trabajar en una empresa, mientras que en el de Washington sí.
El caso podría languidecer durante años en los tribunales. Mientras tanto, algunos sectores financieros han indicado que Boeing podría trasladar esa planta a la India, por ejemplo, una alternativa viable y perfectamente legal.