Si usted es un inversor extremadamente optimista sobre el desarrollo de la crisis en Europa, con un mercado que recobrará el impulso alcista, y no quiere leer ninguna opinión negativa al respecto, debería finalizar la lectura de este artículo en estos momentos.
El analista de bancos de Deustche Bank, Francesco Curto, ha echado un vistazo a cómo el mercado está reaccionando a la crisis de la deuda de la zona euro, y predice que si las cosas se ponen peor las bolsas mundiales podrían perder más de un tercio de su valor. El sector financiero podría dejarse en el camino hasta dos tercios de su capitalización.
Los mercados están cada vez más preocupados por la falta de unidad entre los políticos europeos frente a la crisis de deuda soberana en un momento de sensible agravamiento. El fracaso hasta ahora de las diversas medidas adoptadas para fomentar la confianza entre los inversores ha impulsado a la prima de riesgo del mercado de acciones.
Deutsche Bank cree que la continuación de esta tendencia es el principal riesgo para unas acciones mundiales que podrían perder el 35% de su valor si la situación se deteriora en una crisis financiera como la ocurrida tras la caída de Lehman Brothers en 2008.
La comparación entre la crisis del euro y al de Lehman ha añadido leña al fuego en las últimas semanas.
Francesco Curto dice que la mayor parte de la caída de los precios de las acciones vendría de la mano de un aumento en la prima de riesgo hasta los niveles que vimos en marzo de 2009. El resto sería una consecuencia de una menor rentabilidad como resultado de la inevitable desaceleración económica mundial relacionada con un ajuste desordenado.
En un escenario más leve, en el que la crisis estíé contenida y no se extienda a la economía real que, Deutsche Bank todavía espera una caída del 12% en el MSCI World index.
Sin embargo, una acción rápida de las autoridades europeas podría evitar el peor escenario. Pero los riesgos de deterioro del escenario más leve se han incrementado claramente en las últimas semanas.
Bajo el peor escenario, podríamos esperar un mal comportamiento del sector financiero (Deutsche Bank dice que perdería 2/3 de su valor) y los sectores financieramente apalancados como son las Elíéctricas, Industriales, Telecomunicaciones y Consumo Discrecional.
Los sectores más protegidos en este escenario tan adverso serían Farmacíéuticas, Consumo Básico y Petroleras. Las regiones económicas apalancadas operacionalmente como Asia, Japón y Europa serían las más perjudicadas. Deutsche Bank prefiere compañías del S&P 500 con balances saneados.
En este informe parece que se ignora el problema de deuda de los Estados Unidos, pero Deutsche Bank está en lo correcto por preocuparse por la reacción (o mejor dicho inacción) de las autoridades europeas. De lo que no se les puede acusar es de una acción rápida, ya que los movimientos de los líderes europeos parecen solo producirse cuando la situación llega a un punto crítico.