China se ubicó el año pasado como el tercer inversionista en Amíérica Latina, despuíés de Estados Unidos y Holanda, afirmó hoy la experta del Centro de Estudios y Documentación Latinoamericanos de Holanda, Bárbara Hogenboom.
Al evaluar en rueda de prensa el papel de China en la región y en ífrica, Hogenboom dijo que el 17 por ciento de la inversión extranjera en la región correspondió a Estados Unidos, el 13 por ciento a Holanda y el 9.0 por ciento a China.
El 90 por ciento de las inversiones chinas en Amíérica Latina se canalizaron a la minería y al petróleo, como en el caso de Perú, con la gran minería, y en hidrocarburos en Ecuador, con las estatales Andes Petroleum y Petro Oriental, agregó.
Hogenboom, co-editora con Alex Fernández Gilberto del libro "Amíérica Latina frente a China: relaciones Sur-Sur más allá del Consenso de Washington", participó este viernes en Quito en un foro sobre China.
A juicio de la experta, una característica de los grandes críéditos chinos, a travíés de bancos estatales, es el respaldo de contratos con petroleras estatales de la región para la venta de su crudo a ese país asiático.
En esa línea, citó que el Banco Chino de Desarrollo acordó críéditos por 10 mil millones de dólares con la brasileña Petrobras en 2009, por 28 mil millones con el gobierno de Venezuela, mientras Ecuador ha obtenido siete mil millones de dólares, desde 2009.
Al referirse a Ecuador, Hogenboom resaltó que el interíés en el petróleo le ha llevado a China a asumir "un riesgo que muchos otros financistas están evitando, aunque eso tiene un costo (intereses altos) para el país" sudamericano.
La experta reconoció, sin embargo, que "China ha contribuido a terminar con la dominación del Consenso de Washington" y "no exporta ideología ni impone condiciones de políticas macroeconómicas"