IAG ganó en el primer semestre del año 71 millones de euros, frente a los 352 millones de píérdidas del balance proforma del mismo periodo del año anterior, cuando ambas compañías operaban por separado.
Su facturación se situó en los 7.773 millones de euros, de los que 6.448 millones provienen de los ingresos por pasajeros y 592 por carga.
El consejero delegado de IAG, Willie Walsh, indica que se trata de una buena primera mitad del año con retorno a los beneficios operativos, aunque el coste del combustible sigue siendo un problema importante pues se ha encarecido un el 32%.