WASHINGTON.- Sanford Wallace, conocido como el “rey del spamâ€, se entregó a las autoridades de Estados Unidos tras ser acusado de idear un mecanismo que bombardeó a usuarios de Facebook con más de 27 millones de mensajes basura.
El hombre de Las Vegas se entregó a agentes del FBI para enfrentar 11 cargos de fraude, daños intencionales a computadoras protegidas y desacato por violar órdenes previas de mantenerse alejado de los sitios de las redes sociales Facebook y MySpace, dijeron fiscales en San Jose, en el estado de California, en la noche del jueves.
Wallace, de 43 años, desarrolló un programa capaz de eludir los filtros de spam de Facebook y colocó un mensaje alentando a los usuarios de la red social a visitar un sitio, aparentemente de un amigo, según la acusación.
Los usuarios debían ingresar su dirección de correo electrónico y sus claves, y eran luego redirigidos a otro sitio que dio a Wallance “ingresos sustancialesâ€, según el acto de acusación.
El programa de Wallace recogía información de los usuarios, incluyendo sus listas de amigos a quienes enviaba mensajes de spam.
Las cuentas de unos 500,000 usuarios de Facebook fueron comprometidas entre noviembre del 2008 y marzo del 2009, facilitando el envío de más de 27 millones de mensajes de spam, según los fiscales federales.
Facebook había demandado a Wallace en el 2009 y un juez federal le ordenó no acceder a la red social. Pero el programador violó repetidamente la orden más temprano este año, dijeron los fiscales.
En aquella oportunidad el juez ordenó una indemnización de 711 millones de dólares para Facebook, aunque la compañía dijo que no esperaba ver la mayor parte de esa suma. Facebook aplaudió las nuevas acusaciones.
“Continuaremos buscando y apoyando las consecuencias tanto civiles como criminales para quienes generan spam y otros que tratan de dañar a Facebook o a las personas que usan nuestro servicioâ€, dijo Chris Sonderby, un abogado de la compañía, en una declaración.
Wallace compareció el jueves ante el tribunal y fue liberado tras pagar una fianza de 100,000 dólares. Se declaró no culpable.