BRASILIA -- Brasil mantuvo un saldo positivo en la generación de empleos formales en julio, aunque el número de puestos de trabajo fue inferior al mismo mes del año pasado, informó el martes el gobierno.
El ministro de Trabajo, Carlos Lupi, atribuyó la disminución en el número de puestos laborales a la entrada de bienes importados, provocada por la valorización de la moneda local, el real, frente al dólar estadounidense, que encarece la producción en Brasil y abarata las compras en el exterior.
En julio fueron creados 140,5 nuevos puestos formales de trabajo, 22,6% menos que el mismo mes del año pasado cuando se crearon 181 empleos, según datos del Ministerio de Trabajo.
En los primeros siete meses de este año, la economía brasileña generó 1,59 millones de empleos formales, 14% menos que el mismo período del anterior, con 1,85 millones.
Lupi consideró que la entrada de productos importados ha perjudicado el mercado laboral brasileño. "Lo que disminuye los empleos en el Brasil de hoy es eso", comentó el ministro en conferencia de prensa.
Pese a la disminución, el ministro anticipó que habrá una recuperación en el campo laboral en los últimos meses del año para una creación de 3 millones de puestos de trabajo en todo 2011, por encima de los 2,52 millones creados el año pasado, el más alto del que se tiene registro