El presidente Barack Obama, en busca quizás de un descanso de la realidad tras un duro verano luchando por reactivar la economía estadounidense y enfrentando a los republicanos, eligió una lista de lecturas para sus vacaciones cargada a la ficción.
La Casa Blanca informó que cuatro de los cinco libros que Obama eligió para sus nueve días de vacaciones familiares son novelas.
La lista de lectura de Obama -al igual que las críticas de los republicanos por tomarse vacaciones mientras la economía se tambalea- es un ritual del verano estadounidense.
Sin embargo, esta vez su selección dejó de lado las biografías de connotados estadounidenses, que usualmente forman parte de las lecturas de los presidentes.
Obama eligió dos de los libros en una salida con sus hijas Sasha y Malia el viernes: "The Bayou Trilogy", una obra de misterio escrita por Daniel Woodrell y ambientada en Louisiana, y "Rodin's Debutante", una novela de Ward Just que describe cómo un hombre adquiere su conciencia política al irse a vivir a un barrio conflictivo del sur de Chicago.
Esta última novela rememora de algún modo los tiempos en que Obama era un trabajador social antes de entrar en política.
El presidente tambiíén incluyó "Cutting for Stone", una novela de Abraham Verghese que cuenta las vidas de dos niños que nacen unidos por el cráneo en Etiopía.
La lista de ficción la cierra "To the End of the Land", una novela de David Grossman que retrata a una madre que recorre Israel mientras su hijo pelea en la guerra con la esperanza de que si no puede ser ubicada no se enterará de las noticias de su muerte, manteniíéndolo vivo de esta forma.
El mandatario tambiíén incluyó "The Warmth of Other Suns", de Isabel Wilkerson, la única obra de no ficción de la lista, que describe la migración de los negros estadounidenses desde el sur.
Los republicanos han criticado a Obama por descansar por tercer verano consecutivo en Martha's Vineyard, una lujosa isla en la costa de Massachusetts que tambiíén ha sido la favorita de otros presidentes demócratas como John Kennedy y Bill Clinton.
La Casa Blanca dice que el país no envidia que Obama pase un tiempo con su familia, pero ha tenido cuidado de que hasta ahora no se filtren fotos del mandatario jugando al golf.