Según publica el Financial Times, el Fondo Monetario Iternacional (FMI) en un borrador de su próximo informe de estabilidad financiera global, ha señaldo que los bancos europeos se enfrentarían a píérdidas de hasta 200.000 millones de euros, debido a su exposición a los bonos soberanos de los países de la periferia europea en problemas.
Los analistas de Ahorro Corporación valoran esta noticia:
En nuestra opinión el cálculo del FMI carece de rigor metodológico por dos razones.
- En primer lugar, una parte significativa de la exposición a bonos soberanos está clasificada como hasta vencimiento o directamente dentro de la cartera de príéstamos y en estos casos los bancos no tienen que valorarlos a precios de mercado dado que, en el supuesto de que el emisor no haga un default, los bancos cobrarán el 100% del valor nominal a vencimiento y no se producirá ninguna píérdida. Hasta el momento, el único caso de reestructuración de deuda calificado como default y que ha llevado a la necesidad de un writedown ha sido Grecia.
- En segundo lugar, en caso de tener que hacer un impairment de una cartera a vencimiento, los principios contables no prevíén que se utilice el precio de mercado como referencia sino el valor actual de los flujos de caja, por lo que incluso en un escenario de default no necesariamente las píérdidas se pueden calcular en base al valor de mercado de los bonos. Por último, tal y como subrayado por la ministra Salgado, el análisis del FMI no tiene en cuenta las plusvalías procedentes de las exposiciones a bonos de Alemania y otros países el precio de cuyos bonos ha subido.
En nuestro informe del pasado agosto “Soberano DPV estresado, prueba superadaâ€, replicamos el stress test de la EBA en caso de estresar tanto la cartera de negociación como la cartera de activos disponibles para la venta (DPV) es decir, las únicas valoradas a precios de mercado, en el supuesto de que no se produzcan escenarios de default en Portugal, Irlanda y por supuesto en Italia y España. En este escenario que nos parece el más probable, el impacto para los bancos sería significativo pero asumible, pues los bancos españoles se quedarían con ratios de core capital estresados 2012e entre el 5,4% (Banco Pastor) y el 9,7% (BBVA