La caja alicantina, intervenida en julio por el Banco de España, reveló ayer por fin la situación de su cuenta de resultados, que arroja unas píérdidas de 1.136 millones de euros en el primer semestre. Un obstáculo más de cara a la futura subasta de la entidad.
Las cosas se complican para CAM. Los resultados del primer semestre dibujan un escenario desolador con unas píérdidas de 1.136 millones de euros y una tasa de morosidad del 19%, muy superior al 9,1% de diciembre de 2010 y, con diferencia, la más elevada del sistema financiero español. En definitiva, una mala carta de presentación de cara a la subasta de la entidad, prevista para finales de octubre o principios de noviembre.
La disolución de Banco Base el 31 de marzo, SIP del que formaba parte la entidad alicantina, tiene mucho que decir a la hora de explicar las cuentas de la CAM. El Banco de España permitía a las entidades que formaban parte de este tipo de uniones contabilizar el deterioro de los activos contra reservas y no contra resultados, algo que hasta ahora había evitado los números rojos. En esta ocasión, el deterioro de activos ha sido precisamente el detonante de las píérdidas, ya que ha supuesto un gasto total de 1.571 millones de euros contra la cuenta de resultados. Así, 1.147 millones han correspondido a deterioro de activos financieros, a los que se suman otros 424 millones de euros, que incluye el deterioro de los inmuebles adjudicados.
CAM ha tenido por tanto que hacer frente sin red al impacto en sus activos de la crisis económica e inmobiliaria y tambiíén a una actividad comercial que entró en letargo una vez que la entidad tuvo que concentrar esfuerzos en resolver sus problemas de capital, que han desembocado en la intervención del Banco de España el pasado mes de julio.
Así, el nivel de solvencia de CAM -que suspendió el test de estríés del pasado julio- alcanza a junio apenas el 4,8%, contemplando el Tier 1 más el Tier 2, según explica la entidad. Y mejora al 11,8% al incorporar la inyección de capital prevista por el FROB, de 2.800 millones de euros.
Eso sí, para contabilizar el impacto total del reflotamiento de sobre las arcas públicas queda por ver si se establece un esquema de protección de activos a la hora de subastar la entidad, un sistema que se activó en la intervención de Cajasur y mediante el cual el FROB se comprometía a asumir píérdidas adicionales que puedan darse en ciertos activos (en CCM el saneamiento se hizo mediante el Fondo de Garantía de Depósitos).
En cuanto al balance de situación, la CAM presenta un críédito bruto a clientela de 52.320 millones de euros, de los que 50.847 corresponden al sector privado. Los deudores con garantía real, la mayoría hipotecas, ascienden a 31.076 millones, los príéstamos y pólizas con garantía personal alcanzan los 7.962 millones de euros, mientras que el críédito comercial presenta un saldo de 555.
En el otro lado de la tarta, los recursos de clientes ascienden a 53.008 millones de euros, los díébitos de valores negociables y pasivos subordinados alcanzan los 11.023 millones de euros, los pasivos por contratos de seguro alcanzan los 2.393 millones y las operaciones en el mercado monetarios, 2.116 millones. En cuanto a los depósitos, aquellos a la vista alcanzan los 7.729 millones de euros, mientras que las imposiciones a plazo fijo se cifran en 22.059 millones.
CAM explicó ayer en una nota enviada a la CNMV que los resultados son provisionales, a la espera de los definitivos, el 9 de septiembre. En cualquier caso, no espera grandes cambios y están a la espera de una revisión limitada por parte de KPMG. La auditora del grupo añadirá en su informe una limitación sobre la recuperabilidad de los activos fiscales del grupo. En otras palabras, no se pronunciará sobre los derechos de cobro que tiene con Hacienda (2.308 millones) puesto que para poderlos deducir necesita entrar en beneficios.
Pendiente un nuevo cupón de preferentes
El anuncio de las píérdidas que acumula CAM al cierre del primer semestre amenaza con complicar el próximo pago del cupón de las participaciones preferentes de la entidad, previsto para el 29 de septiembre. La normativa establece que ese pago se suspende si la entidad emisora ha registrado píérdidas en el ejercicio anterior, una circunstancia que no se da en CAM, aunque la entidad ha sufrido cuantiosos números rojos a junio.
El FROB ya autorizó el pago de cupón de preferentes el 15 de agosto, correspondiente a emisiones de 2011 y 2002. Las preferentes de CCM, intervenida por el Banco de España en marzo de 2009, fueron amortizadas al mismo precio que pagaron los pequeños inversores. Cajasur siguió pagando sin falta la remuneración de sus preferentes, salvo un único cupón, pese a las píérdidas de 596 millones de 2009.