La petrolera estatal mexicana Pemex pagó en promedio unos 19,92 euros por cada acción de Repsol-YPF que compró en los últimos días para elevar su participación en la petrolera española a casi un 10 por ciento, según documentos presentados al regulador del mercado.
Pemex compró un 4,6 por ciento adicional del capital de Repsol-YPF como parte de un pacto de accionistas con la constructora Sacyr , que posee un 20 por ciento de la petrolera.
El acuerdo busca ejercer una mayor influencia en la decisiones de la firma española.
La operación ha despertado fuertes tensiones en el ámbito político y empresarial español, mientras que el órgano ejecutivo de Repsol-YPF ha solicitado al regulador energíético que abra una investigación sobre el caso, al entender que afecta a actividades que requieren de su autorización.