Ocho multinacionales de la alimentación han ofrecido una donación conjunta de dos millones de dólares para que la Organización Internacional del Trabajo (OIT) refuerce su programa de lucha contra el trabajo infantil en las comunidades dedicadas al cultivo de cacao en Ghana y Costa de Marfil.
Estos son los dos principales países productores de cacao y juntos representan el 60 por ciento de la producción mundial.
"En ambos países, las prácticas de trabajo inadmisibles en los cultivos de cacao se traducen en un gran número de niños que realizan tareas peligrosas o sacrifican su educación", señaló la OIT al anunciar el acuerdo.
Todas las compañías donantes (ADM, Barry Callebaut, Cargill, Ferrero, The Hershey Company, Kraft Foods, Mars y Nestlíé) tienen intereses en el área del cacao al ser procesadores y fabricantes de chocolates y una variedad de otros productos derivados.
La donación servirá concretamente para reforzar en los próximos cuatro años las actividades del Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil de la OIT, que tiene actividades en los dos países africanos beneficiarios.
La directora del programa, Constance Thomas, consideró que este acuerdo es "histórico" por cuanto revela una comprensión del desafío que supone el trabajo infantil en la agricultura, el sector que más mano de obra de niños emplea.
Se estima que 132 millones de menores realizan trabajos agrícolas, lo que representa el 60 por ciento de los niños trabajadores del mundo.