La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francíés, Nicolas Sarkozy, han advertido al primer ministro griego, Yorgos Papandreu, de que Grecia no recibirá ni un cíéntimo más de ayuda si el gobierno heleno no cumple estrictamente los acuerdos alcanzados en la cumbre de la semana pasada.
Tras una reunión de urgencia entre Merkel, Sarkozy, Papandreu y otros dirigentes internacionales, entre los que se encontraba la directora del FMI, Christine Lagarde, la canciller y el presidente galo han anunciado el bloqueo de la ayuda de 8.000 millones de euros destinada al país hasta que despeje las incertidumbres y han emplazado a Grecia a que se pronuncie, lo antes posible, sobre "si quiere seguir construyendo el futuro del euro", en palabras de Sarkozy.
El primer ministro heleno no ha tardado en responder a la petición de rapidez en la convocatoria y ha planteado que tenga lugar el 4 de diciembre, es decir, antes del próximo Consejo Europeo, que volverá a reunir a los líderes de la zona euro.
De manera más concreta, Merkel ha apuntado que el referíéndum anunciado el pasado lunes por Papandreu "deberá referirse a la cuestión esencial de si Grecia quiere o no continuar en el euro".
La canciller alemana tambiíén ha asegurado que el sexto tramo sólo se podrá pagar si Grecia acepta todas las partes del acuerdo pactado en la cumbre de la eurozona del 27 de octubre".
"La situación es la siguiente: Grecia está en una situación peligrosa. Acordamos un plan para solucionar su problema. El primer ministro no nos consulta y toma unilateralmente la decisión de convocar un referíéndum que desestabiliza la psicología de la zona euro", ha resumido Merkel para justificar que "la zona euro es una cuestión de solidaridad" y que sin el compromiso de Grecia para aplicar los ajustes incluidos en el plan, no habrá más ayudas.
El euro, una prioridad
La prioridad que se han fijado ambos líderes es mantener la unidad de la zona euro y con este objetivo, Sarkozy ha convocado para primera hora de esta mañana una reunión con los líderes del Eurogrupo que se encuentran en Cannes para la cumbre del G-20.
En el encuentro, al que no asistirá Papandreu, se analizarán los últimos movimientos en torno a la crisis de Grecia y las decisiones adoptadas esta misma noche para definir la estrategia que llevará Europa a la cumbre de las grandes economías.
"El euro tiene que ser estable y lo queremos lograr mejor con Grecia que sin Grecia. La estabilidad del euro es nuestra prioridad", ha dicho la canciller alemana.
Apoyo del FMI
En la misma línea que Merkel y Sarkozy se ha manifestado la directora general del FMI, Christine Lagarde, que ha vinculado el desbloqueo del sexto tramo de ayuda a Grecia al resultado del referíéndum.
"Tan pronto como el referíéndum se complete, y se elimine toda incertidumbre, haríé una recomendación al Comitíé Ejecutivo del FMI respecto al sexto tramo de nuestro príéstamo para apoyar el programa económico en Grecia", dijo Lagarde en un comunicado recogido por la agencia Efe.
"Sigo convencida de que el acuerdo alcanzado por los líderes de la zona euro la semana pasada, que incluye una reducción sustantiva de la carga de deuda de Grecia y apoyo financiero adicional para un nuevo y ambicioso programa, beneficiará enormemente a Grecia al ayudar a restaurar el crecimiento y crear empleo", indicó.