Las cifras hablan por sí solas: CaixaBank; BBVA; Bankia; Sabadell; Popular; Bankinter y Santander han aumentado su stock de ladrillo en 1.713 millones de euros en tan sólo tres meses. Se trata del importe neto de los inmuebles que tienen en balance, es decir, descontando ya las provisiones que tienen hechas para cubrir las minusvalías con las que venderán estos activos.