Por... JULIE CARR SMYTH
COLUMBUS, Ohio, EE.UU. -- Estados Unidos está atento a una batalla en las urnas de Ohio el martes, que pondrá en la balanza los derechos sindicales de los trabajadores públicos frente a los intentos republicanos para tratar de reducir el tamaño del gobierno y limitar los alcances del trabajo organizado.
La votación tendrá consecuencias políticas nacionales, desde legislaturas estatales hasta la Casa Blanca.
Una pregunta en la boleta de votación, llamada Tema 2, pide a los votantes aceptar o rechazar una larga versión revisada de la ley de negociación colectiva en Ohio, que el gobernador republicano John Kasich promulgó en marzo, menos de tres meses despuíés de que su partido recuperó el poder en un estado muy dividido políticamente.
Miles de personas llegaron al capitolio estatal en protesta contra la legislación, conocida como el proyecto de ley número cinco del Senado, provocando que los funcionarios estatales cerraran las puertas del Congreso preocupados por la seguridad de los legisladores.
La legislación afecta a más de 350.000 policías, bomberos, maestros, enfermeras y otros trabajadores del gobierno. Establece la reducción obligatoria al mínimo de la atención míédica y de las pensiones para empleados gubernamentales sindicalizados, prohibe las huelgas de trabajadores públicos, descarta los arbitrajes obligatorios y prohibe los ascensos basados sólo en la antigí¼edad.
Al incluir a la Policía y los bomberos, la ley de Ohio fue más allá de la que se hizo en Wisconsin, la primera que promulgó una serie de medidas restrictivas de los sindicatos, impulsadas por los gobernadores republicanos este año, mientras enfrentan fuertes recortes presupuestarios y capotean las críticas del movimiento Tea Party, un grupo conservador republicano que se muestra harto de los excesos en el gasto del gobierno.
Por su parte, los gobernadores demócratas, incluso Andrew Cuomo, de Nueva York, y Dannel Malloy, de Connecticut, tambiíén han enfrentado a los sindicatos de sus empleados gubernamentales en intentos por controlar los costos.
Ese es el motivo por el cual los trabajadores necesitan urgentemente una victoria en Ohio, dijo Lee Adler, que enseña asuntos laborales en la Escuela de Relaciones Industriales y Laborales del estado de Nueva York en la Universidad de Cornell.
"Si el gobernador de Ohio es capaz de mantenerse firme con la legislación aprobada, sería entonces un revíés muy significativo para los trabajadores del sector público y los sindicatos de trabajadores gubernamentales en Estados Unidos", dijo. "De igual forma, si se da el otro resultado, entonces bien podría ofrecer una gran esperanza en que, con el apropiado tipo de movilización y el objetivo adecuado, algunas de las reducciones que han padecido los trabajadores del sector público podrían combatirse".