Brasil es el mercado de moda. Tambiíén para el capital riesgo, que ha puesto su foco en uno de los países de mayor crecimiento de Latinoamíérica. Mercapital ya se ha instalado allí, un paso que en breve seguirá la británica 3i. Tambiíén Altamar Private Equity quiere invertir en fondos con intereses en una región que, no obstante, genera temores como la difícil fiscalidad, la inseguridad jurídica, el diferencial del tipo de cambio, el recalentamiento de la economía y, sobre todo, la corrupción.
Mercapital lleva un año con oficina abierta en Sao Paulo, una ciudad que Javier Loizaga, presidente de la firma, calificó como el actual primer centro financiero mundial. El ejecutivo, que vive a caballo entre España y Brasil, considera que es un mercado que se asemeja al español en la díécada de los ochenta, con grandes posibilidades de inversión y con más preparación a nivel directivo.
Por su parte, 3i pondrá una pica en el país grande de Latinoamíérica en breve tras nueve meses buscando un equipo local preparado para hacer adquisiciones de entre 30 y 100 millones. En dos años, la empresa de capital riesgo británica pretende tener un fondo puro para Brasil de unos 500 millones de dólares si todo va bien. Porque Maite Ballester, la responsable en España de 3i, recela de ciertos olores cariocas.
“Me preocupa el proteccionismo en algunos sectores. Parece Chinaâ€, explicó ayer unas jornadas organizadas por la firma legal SJ Berwin, al tiempo que admitía su preocupación sobre que “un hotel en Sao Paulo valga más que uno en Nueva Yorkâ€. Un síntoma de recalentamiento de la economía y del sector del capital riesgo sobre el que tambiíén advirtió Claudio Aguirre, presidente de Altamar. “En el primer semestre de 2010 se levantaron 467 millones para invertir en Brasil. En el primer semestre de este año, 3.200 millonesâ€, expuso el expresidente de Merrill Lynch. “Hay que ser muy cauto y es muy importante seleccionar con quien inviertesâ€, sentenció Aguirre al advertir sobre los riesgos de corrupción.
Tras la apertura, tambiíén intervino Gustavo Peixoto, del Grupo Santander, quien centró suponencia en la oportunidad de inversión que está suponiendo para ellos elsector energíético, concretamente el gas y el petróleo, donde se estáproduciendo una reestructuración que ha llevado a la concentración de empresasdispersas y la transformación de la industria pesada en estructuras más ágilesy de tamaño grande que les permitiera salir a Bolsa. Posteriormente, Isabel Rodríguez expuso el enfoque legal de la captación defondos y la estructuración de vehículos, mientras que Mattos Filho, best friend de SJ Berwinen Sao Paulo, hizo un repaso del marco legal y cuestiones relevantes para laestructuración de operaciones de inversión en Brasil.
En cuanto a estos potenciales riesgos jurídicos, Loizaga los definió como “confusión de interesesâ€, pero salió en defensa de Brasil y de su progreso. “La nueva presidenta ha echado a cinco ministros por sospechas de corrupción. Ya me gustaría ver esto en Españaâ€. Una afirmación que corroboró el agregado comercial de la Embajada de Brasil en España, Claudio Girón, quien aseguró que en su país “hay total seguridad jurídicaâ€. Además, insistió en que no hay burbuja, puesto que el críédito inmobiliario sólo es el 5% del sector, frente al 40% de España
