El Banco de Inglaterra rebajó hoy su previsión de crecimiento económico en el Reino Unido a un máximo del 1 % en 2011 y 2012 debido al impacto que la crisis en la zona del euro está teniendo en la recuperación de este país.
Al presentar su informe trimestral, el gobernador del banco emisor, Mervyn King, dijo que la crisis financiera en la zona del euro "supone el principal riesgo" para la economía británica, que afronta "un entorno económico muy difícil".
Aunque se confía en un ligero crecimiento, hay probabilidades de estancamiento en los tres primeros trimestres de 2012 y no se descarta una segunda recesión, señaló.
En general, King advirtió de que "el camino hacia una economía mundial más equilibrada será largo y duro".
Las nuevas previsiones del banco contrastan con las hechas el pasado agosto, cuando pronosticó un crecimiento del 1,5 % este año y del 2,2 % el próximo, cuando van a celebrarse en Londres los Juegos Olímpicos.
Sin embargo, tras continuas caídas de la producción industrial y una demanda casi plana, el Banco avisa ahora de que el Reino Unido se dirige más bien al estancamiento económico, por lo que prevíé tambiíén una eventual caída de la inflación.
Según la institución, la inflación británica, que se sitúa actualmente en el 5 %, alcanzará el objetivo gubernamental del 2 % en la segunda mitad de 2012, mientras que seguirá bajando en 2013 hasta el 1,3 %.
Actualmente, a la alta inflación y un casi imperceptible crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) -del 0,5 % en el último trimestre-, se suma en este país una tasa de paro del 8,3 %, hasta 2,62 millones de parados, la mayor desde 1996, según anunció hoy la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS). EFECOM