El Banco de España ha intervenido el Banco de Valencia, entidad que tiene un agujero de varios cientos de millones de euros, y ha decidido destituir a su consejo de administración.
La Comisión Rectora del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) inyectará 1.000 millones de euros en el capital del banco, a lo que se sumará la apertura de una línea de críédito con otros 2.000 millones para que pueda afrontar sus pagos más inmediatos.
La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha suspendido la cotización de la entidad. El valor de sus acciones caía un 3,27%. Las acciones del banco han llegado a caer más de un 6% durante la sesión.
Es el primer banco intervenido en esta crisis, tras las caídas de Caja Castilla-La Mancha (marzo de 2009), CajaSur (mayo de 2010) y la CAM (julio de 2011).
EL MUNDO adelantó hace dos semanas el 'agujero' de la entidad. Las provisiones necesarias para sanear su balance y los críéditos a las inmobiliarias obligaban a una multimillonaria ampliación de capital.
La decisión se produce despuíés de "haber constatado que -la entidad- no ha podido adoptar las medidas adecuadas para asegurar su viabilidad", explica el comunicado del Banco de España.
El Banco Financiero y de Ahorros (BFA), presidido por Rodrigo Rato, posee el 27% de Banco de Valencia. El consejo del BFA se reúne esta tarde. El peso del Banco de Valencia en el sistema bancario español es del 0,74% del total de los activos.
La entidad presentaba hasta junio un beneficio neto de 16,7 millones de euros, un 64,1% menos que en el ejercicio anterior. La entidad tenía que haber difundido ya sus resultados a septiembre, pero no lo ha hecho.