Francia pidió nuevas sanciones "a una escala sin precedentes" contra Irán, en respuesta al programa nuclear de la república islámica, proponiendo que se deje de comprar su petróleo y se congelen los activos del banco central.
El presidente francíés, Nicolas Sarkozy, envió cartas a los líderes de Estados Unidos, Gran Bretaña, Alemana, la Unión Europea, Canadá y Japón en las que propone las nuevas acciones luego de que la Agencia Internacional de Energía Atómica (IAEA, por su sigla en inglíés) expresara su preocupación la semana pasada sobre el programa nuclear de Teherán.
"Mientras Irán desarrolla su programa nuclear, se niega a negociar y condena a su gente al aislamiento, Francia propone nuevas sanciones a una escala sin precedentes para convencer a Irán de que debe negociar", dijo un comunicado de la oficina del presidente Nicolas Sarkozy.
"Francia además propone a la Unión Europea y sus estados miembro, a Estados Unidos, Japón, Canadá y otros países que tomen la decisión de congelar los activos del banco central de Irán (y) detener la compra de petróleo iraní", agregó.
El ministro de Industria de Irán, Mehdi Ghazanfari, advirtió el lunes que las amenazas de países occidentales de reforzar las sanciones sólo dañaban sus intereses.
El comunicado francíés instó a Irán a suspender de inmediato todas las actividades nucleares y de misiles balísticos prohibidas por el Tratado de No Proliferación nuclear y por las resoluciones de la ONU y la IAEA. Exhortó a Teherán a ser abierto sobre su programa nuclear cooperando con la IAEA.
Gran Bretaña ordenó el lunes a sus instituciones financieras que no lleven a cabo más negocios con sus pares iraníes, aunque una fuente en Londres dijo que las nuevas sanciones no serán contra el comercio de petróleo.
Canadá, en tanto, prohibió la venta a Irán de bienes que se utilizan en la industria petroquímica, de crudo y gas, dijo el lunes el Gobierno.
La prohibición no se aplicará a los contratos anteriores al 22 de noviembre, dijo el canciller John Baird en un comunicado.
El ministro dijo que Canadá bloqueará casi todas las transacciones con Teherán, excepto la de los ciudadanos de origen iraní que envíen dinero a sus familias en Irán.
"El comportamiento del ríégimen iraní es una seria y urgente amenaza a la paz", dijo el comunicado francíés.
"Además de la amenaza inaceptable de proliferación nuclear, tambiíén existe el riesgo de desencadenar una escalada militar en la región, que podría tener consecuencias catastróficas para Irán y el mundo", añadió
