Culpa de la situación de desconfianza a la falta de una solución política ambiciosa
La zona euro se aproxima a un cruce decisivo en el que habrá sólo dos caminos posibles: o una mayor unión o una fragmentación del euro. La agencia de calificación crediticia Moody’s alerta en su último informe sobre la moneda común de que "la falta de medidas políticas para estabilizar las condiciones del mercado han elevado el riesgo crediticio" y advierte de que ello podrá tener consecuencias negativas para los ratings soberanos de la eurozona.
El texto, enviado tras las últimas informaciones que apuntan a la creación de una Europa de dos velocidades impulsada por Alemania y Francia, considera que "a pesar del aumento de la presión del mercado, la ausencia de una resolución efectiva de la crisis puede tener consecuencias para los países" y lleva a la zona euro a una decisiva encrucijada entre una integración más ambiciosa o "una mayor fragmentación".
Pese a que Moody’s sigue manejando como escenario central que la zona euro se mantenga unida sin nuevos impagos generalizados, considera que este "positivo" escenario conlleva igualmente "implicaciones muy negativas para las calificaciones crediticias". Y echa la culpa a la falta de una solución política ambiciosa, que sólo llega despuíés de una serie de shocks que provocarán que más países pierdan el acceso a la financiación del mercado y por tanto requieran de nuevos programas de ayuda externa. "Esto provocará muy posiblemente que a estos países se le degrade su nota hasta el grado especulativo [bono basura]", alerta el informe.
Durante las últimas semanas, según Moody’s, "la posibilidad de escenarios más negativos ha aumentado". Esto refleja "las incertidumbres políticas de Grecia e Italia, así como sobre la quita final que tendrán que asumir los acreedores de Grecia, el íénfasis de la última cumbre europea en que este apoyo está condicionado y el empeoramiento de las previsiones económicas para la zona euro".
Así, las dos alternativas posibles que contempla la agencia son "más quiebras de países o la salida del euro de algunos de ellos". La primera posibilidad "ya no es insignificante" debido al cariz que ha tomado la crisis de deuda soberana. Y un proceso de nuevos impagos podría llevar a algunos países a salir de la moneda común. "Moody’s cree que una salida múltiple de la moneda común -o, en otras palabras, una fragmentación de la eurozona- tendría repercusiones negativas para todos los países".
Por eso, insta a los líderes europeos a llevar a cabo nuevas medidas para restaurar la confianza porque, de lo contrario, la agencia alerta con bajadas masivas de rating durante el primer trimestre de 2012.