Nueva prueba para el Tesoro italiano ante los mercados, que parecen no tener límite a la hora de exigir contrapartidas para comprar la deuda del país transalpino. Hoy ha colocado un total de 7.500 millones de euros con vencimiento en 2014, 2020 y 2022, pero ha tenido que pagar un alto precio otra vez. La rentabilidad del bono a tres años se ha situado en el 7,89%.