Las grandes promotoras cierran el penúltimo trimestre del año con ventas que apenas superan las 300 viviendas cada una. Sólo Martinsa Fadesa registra más operaciones, pero gracias al mercado internacional.
Las seis grandes inmobiliarias cotizadas, Colonial, Martinsa Fadesa, Metrovacesa, Reyal Urbis, Realia y Quabit han logrado cerrar 1.329 preventas durante los nueve primeros meses del año.
Una cifra de ventas bastante menor a las registradas en los años anteriores a la crisis financiera y que queda desvirtuada por las 717 preventas registradas por Martinsa Fadesa, ya que la gran mayoría de estas operaciones se han producido fuera de España.
Detrás de Martinsa, la promotora cotizada que más viviendas ha adjudicado está Quabit. La compañía presidida y controlada por Fíélix Abánades ha cerrado 335 preventas, aunque muchas de estas unidades se las han quedado dos sociedades vinculadas a entidades financieras. Atrás quedan las 2.093 viviendas que esta empresa (antes llamada grupo Astroc) entregó durante el mismo periodo de 2007.
Las inmobiliarias Realia y Metrovacesa se encuentran en mitad de esta particular tabla de ventas, con alrededor de un centenar de operaciones cerradas durante los nueve primeros meses de 2011.La compañía controlada por Bankia y la constructora FCC entregó 220 viviendas y cerró 146 preventas. Entre enero y septiembre de 2007, Realia entregó un 70% más de inmuebles (705) y vendió casi un 60% más, es decir, 382 casas. Por su parte, Metrovacesa, que antes del estallido de la burbuja inmobiliaria vendía unas 1.600 viviendas, ha logrado 135 preventas.
Dentro de este grupo de grandes inmobiliarias, la firma que menos viviendas ha vendido destaca Colonial. La compañía presidida por Juan Josíé Brugera está volcada en su actividad patrimonial, como parte del acuerdo de refinanciación con su banca acreedora. Así, en 2011 sólo ha cerrado 25 preventas, frente a las 188 operaciones que realizó en los mismos meses de 2007.
Pero, sin duda, uno de los casos más llamativos es el de Reyal Urbis que reconoce estar viviendo "un fuerte estancamiento en la venta de viviendas" y cuyo plan de negocio no le permite generar nuevo stock disponible para su venta. Atrás quedan las más de 2.000 viviendas que entregaron de enero a septiembre de 2007 y la cifra "ríécord" de 5.858 unidades que contaba en su cartera de preventas. Ahora, la inmobiliaria presidida por Rafael Santamaría obtuvo hasta el tercer trimestre de 2011 unos ingresos directos de 77 millones de sus ventas residenciales