El Tesoro tuvo que pagar las rentabilidades más elevadas desde la implantación del euro tanto en letras como en bonos y el riesgo país tocaba cotas nunca vistas, hasta casi los 500 puntos básicos.
Sin embargo, el Tesoro pudo contener ayer los intereses en una nueva subasta de bonos a plazos de tres, cuatro y cinco años. Colocó 3.750 millones de euros, el máximo del objetivo que tenía previsto, por los que ofreció rentabilidades del 5,203, del 5,280% y del 5,560%, respectivamente. Tambiíén Francia, una de las economías core que ya notaba el contagio de la crisis en sus propias carnes, captó ayer 4.350 millones a 10 y 15 años a un tipo de interíés inferior a las subastas anteriores que había celebrado a esos plazos.
Detrás de este movimiento hay una explicación que confirma la creencia de un cambio de sentimiento de mercado: “Mi apuesta es que se han cerrado posiciones cortas y han apostado fuerte por la no ruptura del euro. Muchas de las compras de hoy (por ayer) venían de hedge fundsâ€, apunta Javier Ferrer, director de la mesa de deuda pública de Ahorro Corporación.
Rentabilidad
El organismo español todavía ha tenido que pagar intereses muy elevados. Por los bonos a cinco años, ofreció el tipo más elevado desde 1997, muy por encima del 4,827% de la subasta de octubre. Sin embargo, esta referencia cotizaba el viernes pasado a niveles del 6,25%. Además, el riesgo país ha pasado de 468 a 350 puntos básicos en una semana. “Muchos hedge fund están cerrando posiciones cortas en bonos españoles, es decir, comprando para cerrar su exposición bajista. Pero han sido sólo una parteâ€, confirma Mariví Llorente, directiva de la gestora británica de hedge fund IAM.
Pese a todo, un 42% de los gestores de este tipo de fondos sigue apostando por una quiebra o una reestructuración de la deuda española o italiana, según una reciente encuesta elaborada por la consultora Aksia. Para lo que resta del año, el Tesoro afronta todavía dos subastas de letras, mientras que tiene que colocar otros 6.200 millones en bonos y obligaciones para cumplir con su estrategia de financiación que anunció a comienzos de este año.
Pero, ¿por quíé este cambio de sentimiento? Parafraseando al multimillonario George Soros, “cuanto peor parece la situación, menos esfuerzo es necesario para cambiarla y mayor potencial de ascenso poseeâ€.
Ha bastado con que los bancos centrales hayan lanzado una señal de que están dispuestos a trabajar juntos para mejorar la situación. El miíércoles, anunciaron una acción conjunta por la que prestarán a la banca el dinero que pida en múltiples divisas. “Creo que el golpe de efecto de los bancos centrales ha sido muy positivo para los mercados. Las subastas de deuda en España y Francia han sido muy positivas desde el punto de vista de la demanda y por el tipo que han tenido que pagarâ€, indica Josíé Luis Martínez, estratega en España de Citi.
Prudencia
Sin embargo, el mercado se mueve por expectativas y íéstas se tienen que cumplir. Las miradas están puestas en la cumbre europea del 9 de diciembre, en la que se espera que se fije la ruta definitiva con la que sacar al euro de la caótica situación en la que se encuentra. De ahí que Martínez abogue por la prudencia: “Creo que la confusión sobre el escenario a corto plazo es tan elevada como para desconfiar de esta mejora de los mercados. Una vez más los inversores confían en que habrá una salida a la crisis de deuda la semana próximaâ€.
En esta misma línea, los expertos de Credit Suisse consideran que si Alemania cede y toma un rol más activo para solucionar la crisis, “la rentabilidad de los bonos italianos caerían, así como los portugueses y españoles, y las acciones de los bancos europeos que están expuestos a esta deuda subiríanâ€â€. ¿Y si no es así? “La inacción de Alemania provocaría la crisis más severa desde el colapso de Lehman Brothersâ€, añaden.
Los mensajes que lanzaron ayer varias autoridades hacen presagiar una cumbre realmente provechosa. El presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, dejó entrever que la institución comprará más deuda para ayudar a España, Italia y otros países con problemas si se acuerda un “nuevo pacto fiscalâ€.
La suerte está echada. Los políticos tienen la varita mágica, ahora sólo tienen que agitarla para empezar a recuperar la confianza de los inversores sobre el euro.
Goldman aconseja vender deuda alemana
La firma estadounidense Goldman Sachs ha lanzado como una de sus recomendaciones prioritarias de inversión para 2012 la venta de bonos públicos de Alemania, ante la posibilidad de que su precio baje por la crisis en la Eurozona.
La entidad cree que una solución a esta crisis exigirá que “parte del riesgo de críédito de los países perifíéricos de Europa pase a Alemaniaâ€. Si no es así y la Eurozona colapsa o varios gobiernos reestructuran deuda, Alemania tambiíén sufrirá por la exposición de sus bancos a otros países del área. Goldman cree que la rentabilidad de los bonos alemanes a diez años, actualmente en el entorno del 2,3%, subirá al 2,8%, informa Roberto Casado, desde Londres.