PARíS, Francia.- Las dos grandes potencias económicas de la Europa continental, Alemana y Francia, parecen haberse juramentado para salvar juntos el euro y cada cual ha cedido un poco.
Las dos naciones apuestan por un nuevo Tratado para la Unión Europea aunque no incluya a los actuales 27 países socios como receta para hacer frente a la actual crisis de deuda de la eurozona, informa "elmundo.es".
"Nuestra preferencia es por un tratado con todos los 27 para que nadie se sienta fuera, pero estamos listos para seguir con un tratado con 17 (los miembros de la zona euro) en el que otros serían libres de unirse", indicó Sarkozy al tíérmino de un encuentro con la canciller íngela Merkel para hallar una salida de la crisis que atraviesa la zona euro.
O sea que probablemente el pacto más urgente se realice sólo con los países de la eurozona y luego se extienda al resto de la UE. La reforma es una victoria para Alemania. La fecha fecha tope para la firma del nuevo tratado es marzo de 2012."Queremos asegurarnos de que los desequilibrios que han llevado a la situación actual en la zona euro no vuelvan a suceder", subrayó el presidente galo.No habrá eurobonos porque "no son una solución a la crisis", dijo el presidente francíés. Pero sí, en cambio, sanciones urgentes votadas por mayoría cualificada para aquellos países que no logren mantener los díéficit de sus presupuestos por debajo del 3% del PIB. Ese castigo podría ser evitado sólo por una mayoría cualificada. En ambos puntos, Angela Merkel se sale con la suya.
Parece que no hay tiempo para esperar a los referíéndum nacionales sobre Europa ni a que los estados miembros incluyan la regla de oro en sus respectivas constituciones. Así que Francia y Alemania han optado por propugnar una regla de oro "reforzada y armonizada" que será supervisada unilateralmente por el Consejo Constitucional de cada nación, en vez de la Corte Europea de Justicia (gana Sarkozy).Angela Merkel precisó, sin embargo, que no se daría al Tribunal de Justicia Europeo la competencia de impugnar cualquier presupuesto nacional. Sarkozy ha insistido tambiíén en que el tribunal no podría anular los presupuestos nacionales.
Habrá igualmente una reunión mensual de los jefes de gobierno de la eurozona mientras dure la crisis. Además, Alemania y Francia quieren adelantar el Fondo Europeo para la Estabilización Financiera a 2012, subrayó Sarkozy, cuando estaba previsto que iniciara su actividad a mediados de 2013.Por último, el Banco Central Europeo tendrá independencia para ayudar a los países con problemas -una velada concesión de Alemania, filtrada por consejeros del Elíseo, pero no anunciada oficialmente-, aunque no será una reacción automática y se estudiará caso por caso.Mañana, París y Berlín difundirán su acuerdo por escrito en una carta enviada al presidente de la UE Van Rompuy. El eje franco-alemán -conocido ya entre los periodistas como "Merkozy"-- parece convertirse así en el motor de una nueva Europa.
En Roma, el primer ministro Mario Monti presentó ayer al Parlamento el plan de ajuste presupuestario de 30,000 millones de euros que aprobó su gobierno el domingo y contiene, como reconoció, "fuertes sacrificios" que pretenden evitar que Italia caiga en el "abismo" económico, informa la agencia EFE.
En un discurso de más de media hora de duración, el jefe del Ejecutivo ilustró ante los parlamentarios las medidas que contiene ese primer plan de reformas de su gabinete tecnócrata, que se asientan, sobre todo, en cambios en el sistema de pensiones y el aumento o la aplicación de nuevos impuestos.Monti aseguró que no pretende ni pretenderá nunca minimizar la entidad de los ajustes de su plan, pues, dijo, se trata de "fuertes sacrificios", pero indicó que son necesarios ya no sólo para sentar las bases del futuro crecimiento económico del país, sino tambiíén para contribuir a la supervivencia del euro."Fuera del euro y de la casa común de la Unión Europea (UE) sólo queda el abismo, la pobreza y el estancamiento, la caída de las rentas, el aislamiento y, sobre todo, la ausencia de futuro para el país y las jóvenes generaciones.
No hay alternativa", puntualizó Monti."Los sacrificios de hoy nos dan la esperanza de poder construir en el futuro las bases de un periodo de crecimiento (...). Las intervenciones pretenden devolver a Italia la dignidad de uno de los países fundadores de la Comunidad Europea", agregó.Los tres principales sindicatos italianos, CGIL, CISL y UIL anunciaron la convocatoria de paros de 2 y 4 horas de duración para el próximo lunes contra el plan de ajuste presupuestario y de reformas económicas aprobado este domingo por el gobierno tecnócrata de Mario Monti.
La intención del próximo paro es exigir "con fuerza que se abra una negociación" sobre el contenido del plan de ajuste, en particular sobre las reformas del sistema de pensiones y fiscal.
"Pedimos a todos los trabajadores del CISL y del UIL, pedimos a todos los militantes, inscritos y dirigentes que hagan el lunes próximo una huelga-protesta en sus dos últimas horas de trabajo para dirigirnos a todas las sedes de delegación del gobierno para que se escuche nuestra voz y pedir con fuerza que se abra una negociación", dijo uno de los líderes sindicales."Actuaremos de todos los modos necesarios para que fracase el intento de reducir a los agentes sociales a meras comparsas. Pediremos reuniones con todos los grupos parlamentarios porque el Parlamento tiene que garantizar una reunión equilibrada", agregó.Horas despuíés de la comparecencia de prensa de los líderes de CISL y UIL, el principal sindicato del país, CGIL, divulgó un comunicado en el que anuncia su decisión de adherirse a la iniciativa de huelga, aunque elevando el tiempo del paro convocado por su parte a las 4 horas.Esta es la primera convocatoria de movilizaciones contra el plan de ajuste y reformas económicas por valor de 30,000 millones de euros aprobado ayer en Consejo de Ministros, en el que priman, sobre todo, la parte impositiva y cambios en el sistema de pensiones.Entre los principales puntos está el aumento del IVA en dos puntos, del 21 al 23 %, desde septiembre de 2012 y el aumento del tiempo de cotización para jubilarse con las llamadas pensiones de antigí¼edad, que, a partir de 2012, será de 41 años para las mujeres y de 42 para los hombres.Tambiíén se congelan las pensiones superiores a 960 euros al mes, mientras que se mantiene su actualización basada en la inflación para aquellas inferiores.Además en el plan del gobierno, que finalmente no sube el tipo máximo del impuesto sobre la renta de las personas físicas, se tasan los bienes de lujo y se reintroduce el impuesto sobre bienes inmuebles a la primera casa, extendiíéndolo tambiíén a la segunda y tercera vivienda.