Todos tienen mucho miedo a que se venga abajo. No es la primera vez que Antena 3 y La Sexta están tan cerca de cerrar su fusión. Sin embargo, esta vez parece la definitiva. “Es cuestión de días si todo va como tiene que ir, pero no hay nada firmadoâ€, aseguran fuentes conocedoras de las conversaciones. La fecha clave es el 21 de diciembre, día en el que que está previsto un Consejo de Administración de Antena 3 que debería dar luz verde al acuerdo de integración. Si se mantiene esa hoja de ruta, se alumbrará la integración de ambas cadenas en paralelo a la toma posesión de Mariano Rajoy, que se encontrará un mapa audiovisual dominado por dos gigantes que controlan el 85% del mercado.
Ejecutivos de las cadenas apuntan que todo está “muy calienteâ€, sin dar más precisiones. Fuentes próximas a las conversaciones van más allá y añaden que La Sexta ya ha dado el visto bueno a la última contraoferta que se le planteó desde Antena 3 y “sólo es cuestión de que ambas posiciones sean firmesâ€. Incluso no se descarta que el cónclave de la cadena de Planeta tenga que adelantarse si los acontecimientos se precipitan. Diversas fuentes consultadas minimizan la importancia en la negociación de la ecuación de canje definitiva, que durante la última parte de los contactos ha rondado el 85% del nuevo grupo para Antena 3 y el 15% para la cadena de Josíé Miguel Contreras. Y es que tambiíén se ha planteado que Planeta acometa parte de la transacción en cash para paliar los problemas de caja de La Sexta. Los porcentajes variarían en función de ese desembolso.
Sobre el papel, la integración de La Sexta bajo el paraguas de Josíé Manuel Lara terminaría de apaciguar la realidad audiovisual para el nuevo Gobierno de Rajoy en tiempos de decisiones especialmente duras. Al tiempo que culminaría el fracaso del mapa mediático diseñado por Josíé Luis Rodríguez Zapatero. Primero fue la compra de Cuatro -hasta entonces en manos del Grupo Prisa- por Telecinco allá por finales de 2010. El segundo paso sería la integración de La Sexta en el Grupo Planeta, probablemente el único que ha apoyado a Rajoy, incluso en sus momentos más críticos. El presidente del Gobierno electo sólo tendría por delante zanjar el frente de RTVE. En Gíénova están por la labor de resolver el problema de la presidencia y dar un giro a los informativos de la televisión pública desde el minuto uno.
Un escenario de tolerancia audiovisual al que se añade una prensa bajo mínimos, que apenas ingresará este año por publicidad la mitad de lo que recaudaba antes de la crisis. Hasta el más independiente aceptaría críéditos blandos para la reconversión del sector. No obstante, fuentes conocedoras de la estrategia que contempla Antena 3 para la nueva etapa niegan la mayor y aseguran que no hay ninguna intención de cambiar el perfil ideológico de la cadena participada por Jaume Roures, Juan Abelló o WPP. Eso sí, “puede que haya algún tema puntual más sensible donde se espere una cierta sensibilidad, pero poco másâ€, se concede. De hecho, no falta quien asegura haber tomado nota del error de Telecinco al telecinquear Cuatro, un fallo medido en tíérminos de audiencia y de target comercial.
Un acuerdo cerrado antes del verano
La fusión entre Antena 3 y La Sexta parece una serie de íéxito que va acumulando temporadas, sin que sus creadores se decidan a ponerle un final feliz. Precisamente este mes de diciembre se cumplirán dos años desde que ambas partes anunciaban su compromiso, sin que terminaran de fijar fecha de boda. Todo parecía cerrado el pasado mes de agosto, despuíés de que los negociadores de ambas partes se marcharan de vacaciones con el pacto bajo el brazo. “No hay nada firmado, pero las circunstancias facilitan que salgan los númerosâ€, aseguran fuentes fuentes próximas a las conversaciones, en referencia a la debacle publicitaria en las televisiones. Con más impacto en los más pequeños. Contreras concedía entonces que la sería “muy complicado†poner la cadena en números negros en 2011. La salida lógica era acelerar la fusión, que se encontró con un obstáculo inesperado.
Y es el proceso entró en nuevo impasse al verse La Sexta obligada a complacer a Televisa, que aún atesora el 40% de la cadena y que quería un mejor acomodo en la estructura accionarial de la cadena. Imagina –accionista de referencia de La Sexta- y el gigante mexicano acordaba un canje accionarial: la compañía de Emilio Azcárraga Jean entraba con un 14% en el capital de Imagina a cambio de que íésta se hiciera cargo de su participación en La Sexta. Imagina (Globomedia y Mediapro) controlaría –junto a sus socios BBK, El Terrat (Andreu Buenafuente) y Bainet (Karlos Arguiñano)- más del 92% del capital de La Sexta y accedería con una sociedad única a una eventual fusión con Antena 3. “No es lo mismo que los accionistas de La Sexta vayan por separado a una fusión a que se integren desde un vehículo sólido y estableâ€, apuntaban fuentes próximas al pacto.
Días despuíés, el propio Lara jugaba con los tiempos, consciente de que la fruta madura acaba por caer. “Nosotros no tenemos ninguna prisa, si acaso la tienen ellosâ€, aseguraba en conversación con El Confidencial a finales de octubre, durante el XIV Congreso del Instituto de la Empresa Familiar (IEF) celebrado en Valladolid. La cadena acababa de presentar un beneficio de 52 millones hasta septiembre, pese a la crisis publicitaria. “Son gente difícil -añadía-. El acuerdo ya se ha venido abajo tres veces en dos añosâ€. Precisamente es la memoria lo que hace que todos crucen ahora los dedos. La mayoría de gestores de ambas cadenas están fuera esta semana. Si los pactos se cumplen, Antena 3 no debería tardar en lanzar un hecho relevante en que anuncie el comienzo de la due diligence. Y Lara tendrá que empezar a asumir la presencia de “gente difícil†en su accionariado.