¿Por quíé Amancio Ortega invierte en inmuebles?
por Rocío Ruiz en Expansión
La oferta de Amancio Ortega, dueño del grupo textil Inditex y novena fortuna del mundo según la revista Forbes, de comprar el rascacielos madrileño Torre Picasso a FCC ha supuesto un giro en el mercado de inversión no residencial en España, donde este año la mayoría de operaciones han sido protagonizadas por fondos extranjeros.
PlaySin embargo, para los expertos del sector, la operación no sorprende ya que coincide con la política inmobiliaria que el fundador de Inditex sigue a travíés de Pontegadea.
Pese a la crisis, Ortega sigue considerando al ladrillo un sector con futuro. ¿Por quíé?
1. Escoge edificios estrella
Los requisitos de compra de Pontegadea son muy claros: edificios de oficinas y comerciales, destinados al alquiler con contratos a largo plazo y situado en las mejores zonas de una gran ciudad.
Un ejemplo es su puja por Torre Picasso, un inmueble que cumple todos estas características, al estar situado en la zona financiera de Madrid y contar con una ocupación de casi el 100% con inquilinos como Accenture y Ernst & Young. Por íél, ofrece 500 millones de euros.
2. Gran liquidez
Los buenos resultados que cosecha año tras año el grupo Inditex hacen que Ortega cuenta con suficiente liquidez para acometer inversiones de gran envergadura sin necesidad de apalancarse. Las ventas de Inditex alcanzaron los 9.709 millones de euros del 1 de febrero a 31 de octubre. En 2010, Ortega recibió 591,36 millones de euros en concepto de dividendos de Inditex.
Además, la probada solvencia de su compañía, con unas cuentas públicas cotizadas, hacen fácil el acceso de Pontegadea al críédito.
3. En busca de ‘gangas’
La mala situación económica de las grandes inmobiliarias unido con la necesidad de rotar su cartera de activos de otras compañías provocan que en el mercado inmobiliario haya más producto que nunca en venta y a precios impensables hace apenas un lustro.
4. Los mejores expertos
“Su equipo de colaboradores recorre constantemente las distintas ciudades y áreas comerciales de los países donde Inditex está o puede estar presente en el futuro, a la caza de locales óptimos por su localización, calidad, perspectivas comerciales y revalorización de la inversiónâ€, dicen los autores del libro Amancio Ortega: de cero a Zara.
5. Inversión a largo plazo
Las compras inmobiliarias de Amancio Ortega no se limitan a los últimos años. Desde 2002, el dueño de Zara canaliza este tipo de operaciones a travíés de Pontegadea Inmobiliaria, una compañía que se encarga de gestionar los alquileres de su amplia cartera de inmuebles en propiedad.
En 2009, Pontegadea fue la mayor inmobiliaria de España por beneficios, con unas ganancias de 688 millones de euros y con inmuebles por valor de 3.641 millones.
6. Cierre de sus sicav
El impacto de la quiebra del grupo austriaco Meinl en uno de sus vehículos de inversión y, sobre todo, la caída de los mercados bursátiles en los últimos años llevó a Ortega a cerrar, a finales de 2010, sus dos mayores sociedades de inversión de capital variable (sicav).
Tras esta operación, el dueño de Zara disponía de 163 millones de euros para destinar a otras inversiones, como activos inmobiliarios.
Locales de ZARA
“Con independencia de las inversiones, la verdadera expansión inmobiliaria se realiza mediante la adquisición de locales para apertura de nuevas tiendas†Así de seguros se muestran Xabier Blanco y Jesús Salgado, autores del libro ‘Amancio Ortega: de cero a Zara’. En la cartera inmobiliaria de Ortega, se incluyen locales en Nueva York y Milán que usa su marca estrella, Zara.
Oficinas cíéntricas
La sociedad inmobiliaria de Ortega centra su compra en inmuebles de oficinas y comerciales, con un alto nivel de ocupación. í‰ste es el caso de Castellana 79, antigua sede de la aseguradora Axa, que Pontegadea compró y rehabilitó para inaugurarlo este verano con toda la superficie comercial ocupada y casi toda de oficinas. Además, es propietario de una serie de edificios históricos del Santander.
Sucursales
Amancio Ortega tambiíén ha participado en las operaciones de venta y posterior arrendamiento (sale & leaseback) que las entidades financieras han puesto en marcha con sus sucursales y oficinas bancarias. Así, Pontegadea adquirió en 2010 cinco sucursales de banco Sabadell por 55 millones de euros y se interesó por otras alquiladas al BBVA.