Los sindicatos y los partidos de izquierda de Suiza propusieron hoy que el pueblo apruebe en referíéndum aumentar de 4 a 6 las semanas de vacaciones de los trabajadores helvíéticos.
La campaña “Seis semanas de vacaciones para todos†fue presentada hoy a la prensa respaldada por los sindicatos, el Partido Socialista y el Partido Verde, que quieren que los trabajadores se beneficien del aumento de la productividad, que progresó un 20 por ciento en los últimos veinte años.
En el mismo periodo, los salarios crecieron un 4.3 por ciento, por lo que, según los grupos que apoyan la iniciativa, hay que incidir en el número de semanas de vacaciones, que no ha variado en treinta años.
Argumentan que la vida laboral es cada vez más estresante y lo demuestran con datos de la Secretaría de Estado de Economía que revelan que un tercio de la población activa suiza sufre de ansiedad y fatiga.
El coste para la sanidad de este fenómeno se eleva a 10,000 millones de francos suizos (8,263 millones de euros), un monto superior a los 6.800 de francos (más de 5,600 millones de euros) que la implantación de las seis semanas costaría al sistema.
“Los trabajadores deben moderar sus fuerzas porque la vida profesional no es un esprín, sino una maratónâ€, afirmó en rueda de prensa Martin Flí¼gel, presidente del sindicato Travail.Suisse.
Otro argumento usado por el presidente de los Verdes, Ueli Leuenberger, es que el exceso de trabajo afecta a la vida de pareja, es perjudicial para la familia y restringe el compromiso social.
La diputada socialista Josiane Aubert recordó que el 20 por ciento de los hombres de 55 años está fuera del mercado laboral por invalidez y el 40 por ciento de las prejubilaciones involuntarias es por razones de salud.
Otro de los argumentos esgrimidos es que, en la práctica, la mayoría de los suizos que trabajan bajo ríégimen de convenio colectivo ya disfrutan de 5 semanas de vacaciones —no de 4, como es estrictamente obligatorio— por lo que la introducción de cinco días más no variaría tanto la situación.
De hecho, el texto propuesto para ser aprobado en referíéndum el próximo 11 de marzo específica que, en caso de aceptarse, la entrada en vigor de la nueva normativa sería escalonada- a partir de 2013 se establecería obligatoriamente el derecho a cinco semanas y luego se iría incrementando un día por año, hasta alcanzar las seis semanas en 2018.
“La situación económica se anuncia difícil, pero, de todas maneras, nunca habrá un buen momento porque en periodo de fuerte crecimiento los empresarios dirían que hay demasiado trabajoâ€, afirmó Paul Rechsteiner, presidente de la Unión Sindical Suiza.
Aunque a priori parece que la idea debería tener un amplio apoyo, los responsables de la campaña saben que ganar el referíéndum va a ser una tarea difícil, dado que cuentan con la oposición firme del empresariado y los partidos de derecha, sociológicamente mayoritarios.