Indra ha ganado un contrato de 5,1 millones de euros con Enel Green Power para realizar el Roll-Out global del modelo corporativo económico-financiero SAP que tiene implantado en Italia.
El proyecto contempla la mejora y ampliación de la plataforma tecnológica con la inclusión de nuevos módulos en las áreas financiera y logística y su posterior implantación en las filiales de España, Portugal, Grecia, Francia, Estados Unidos, Canadá y Míéxico.
Por otra parte, Indra ha recibido hoy la presión de Barclays Capital que ha rebajado su precio objetivo para la compañía. Sus analistas lo han recortado a 9 desde 10 euros, manteniendo su recomendación de infraponderar.
Desde el punto de vista tíécnico, la cotización de Indra ha conseguido sujetarse, en las últimas semanas cerca de los mínimos del pasado año, los 9,63 euros.
Aunque la tendencia bajista es clara, tanto a medio como a largo plazo, estaremos atentos a su comportamiento en la resistencia de los 10,88 euros, precios en los que calibraremos la fortaleza actual de las compras.
Sólo la superación de este nivel de precios nos haría pensar en una mejora en su maltrecho aspecto tíécnico. Los complicados niveles de acumulación no ayudan por el momento para que veamos un cambio de tendencia.
