Carrefour, la minorista más grande de Europa, está revisando un plan para modernizar sus hipermercados tras la advertencia de que sus ganancias de 2011 estarán en la parte más baja de su rango de pronósticos.
El posible retraso en la implementación de Carrefour Planet pone aún más presión sobre el presidente ejecutivo, Lars Olofsson, considerado ya con los días contados tras seis advertencias de menores ganancias en algo más de un año, una serie de salidas de altos ejecutivos y abruptos cambios de estrategias.
Carrefour, que en el mundo de las minoristas sólo es superada por la estadounidense Wal-Mart, está contando con los nuevos hipermercados Carrefour Planet para revitalizar el bajo desempeño de años, pero el jueves dijo que se centraría en un plan más inmediato para bajar precios y mejorar la eficiencia de sus promociones.
La empresa advirtió de que la ganancia operativa de 2011 estará en el extremo más bajo de una caída prevista de entre un 15 y un 20 %, con lo que se convierte en la más reciente de una serie de grandes minoristas europeas que avisan de menores resultados.
Los ingresos disponibles de los compradores están siendo agotados por las alzas de precios, el díébil crecimiento de los salarios y medidas de austeridad, y por los temores a que la crisis de deuda de la zona del euro pueda arrastrar al mundo nuevamente a una recesión.
Algunos analistas pidieron a Carrefour que cancele la modernización de los hipermercados, diciendo que sus costos y la imagen de lujo de las tiendas no son apropiadas ante un telón de fondo económico de deterioro económico