Ya hemos aprendido la lección. Primero va el país, y luego, las compañías. Así que bancos, elíéctricas y Telefónica podrían recibir tambiíén rebajas de calificación si se hace lo propio con España. El impacto del elevado díéficit público –Montoro afirmaba esta mañana que no puede comprometerse a cumplir con el objetivo-, que podría provocar un incremento de las suspensiones de pago, podría afectar a compañías de la talla de Iberdrola, Gas Natural o Santander, según afirmó ayer S&P en una rueda de prensa celebrada en Londres.
Standard & Poor’s cita, en general, los problemas de díéficit, aunque por sectores, apunta como negativo para las elíéctricas los límites regulatorios impuestos en España y, en el caso de la operadora que preside Cíésar Alierta, el problema de la refinanciación, de entre 7.000 y 8.000 millones de euros, cuenta Expansión.
De todos modos, no es nada nuevo ni sería la primera vez que sucede algo así, pues en los últimos meses, y como consecuencia de la crisis de deuda que azota a Europa, hemos visto ya acciones similares, tambiíén en los casos analizados por Fitch y Moody’s