Según el BCR, la mejora continua de la posición de la liquidez internacional de Perú coloca a la economía del país en una situación de menor vulnerabilidad frente a eventuales turbulencias del mercado financiero internacional, destacó la agencia estatal Andina.
De este modo, las RIN equivalen aproximadamente al 29 por ciento del Producto Bruto Interno (PBI), 5.3 veces los pasivos externos de corto plazo y 89 por ciento de la liquidez total, o a 16 meses de importaciones del país.
En los últimos años las RIN se han incrementado considerablemente, situación muy diferente a la que se vivió en la segunda mitad de los setenta y finales de los ochenta, cuando se registraron reservas internacionales negativas.
El BCR subrayó que, entre las principales economías de la región, el monto de reservas internacionales de Perú como porcentaje del PBI es superior al registrado por Chile (19%), Brasil (16%), Míéxico (13%) y Colombia (10%). Asimismo, Perú y Brasil sobresalen con los valores más altos de reservas internacionales equivalentes a meses de importación.
Las RIN contribuyen a la estabilidad económica y financiera del país en la medida que garantizan la disponibilidad de divisas para situaciones extraordinarias, que podrían darse por choques externos que se manifiesten en un eventual retiro significativo de depósitos en moneda extranjera y una posterior salida de capitales del sistema financiero peruano.
Asimismo, una adecuada disponibilidad de divisas es un indicador de solvencia financiera internacional y mejora la imagen del país, manifestó.
Esto reduce los niveles de riesgo país y eleva los calificativos crediticios de Perú, lo que se traduce en mejores condiciones para la obtención de críéditos del exterior por parte de las empresas peruanas, y en la expansión de la inversión extranjera en el país, indicó.
La administración de las RIN está a cargo del BCR que las gestiona tíécnicamente siguiendo los criterios de seguridad y liquidez y, una vez satisfechos íéstos, procura la mayor rentabilidad.
Las RIN están constituidas por depósitos en divisas en bancos del exterior de primer orden, bonos y valores líquidos de alta calidad crediticia, tenencias de oro, moneda extranjera empleada como medio de pago internacional y Derechos Especiales de Giro (DEG) del Fondo Monetario Internacional (FMI).