El presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, anunció ayer un aumento del IVA en 1,6 puntos, hasta el 21,2%, una medida con la que pretende disponer de recursos para financiar políticas de protección social, según explicó durante su intervención en una entrevista con las principales cadenas de televisión francesas. El incremento se comenzará aplicar el 1 de octubre y, con el fin de que no se contraiga el consumo, quedará compensado con una rebaja en las cotizaciones de las empresas por las nóminas de los empleados, que permita de paso rebajar los costes laborales y aumentar la competitividad. La medida se cifra en 13.000 millones de euros.
Además, Francia comenzará a aplicar una tasa del 0,1% a las transacciones financieras realizadas en Francia, a partir de agosto y que incluirá a los seguros de impago de críédito (CDS), lo que permitirá ingresos por mil millones de euros anuales. Sarkozy confía en que la medida sea imitada por el resto de Europa.
Ya en la cuenta atrás hacia la campaña de las elecciones presidenciales que se celebrarán en mayo, Sarkozy se distanció del discurso de austeridad que domina Europa y defendió que Francia no necesita nuevas medidas de rigor fiscal. Avanzó además que el díéficit público de la economía francesa será del 5,4% en 2011, o incluso el 5,3%, entre tres y cuatro díécimas menos que las previstas hasta el momento.
Sarkozy reconoció tambiíén que las medidas tomadas en la zona euro -entre las que citó las reformas en Italia y España- "han sentado las bases para la estabilidad financiera del mundo y de Europa", que ya no está al "borde del precipicio".
Alemania tensa la cuerda con Grecia
Grecia amenaza con acaparar gran parte del debate en la cumbre de líderes de la Unión Europea que se celebra hoy en Bruselas y en la que tambiíén está previsto abordar los problemas de paro y crecimiento que acosan a Europa. Alemania dio a conocer este fin de semana una dura propuesta para que la UE controle de primera mano los presupuestos de la economía griega, en un momento en que sigue sin cerrarse aún el acuerdo sobre la quita del 50% de la deuda helena entre el Gobierno de Papademos y los acreedores privados, condición para que se active el segundo plan de rescate a Atenas. El diario británico Financial Times apuntaba el domingo a una propuesta de Alemania para que Grecia ceda el control sobre su presupuesto a un comisario nombrado por el Eurogrupo, que podría vetar decisiones gubernamentales y supervisar la aplicación de las medidas, y en la víspera de la cumbre de líderes de la UE de hoy. Esta iniciativa choca con la fuerte oposición del Gobierno griego, que insiste en defender la autonomía económica de su país.