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La lenta recuperación de la economía estadounidense afecta al sector bancario, reconoció hoy el presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos (FED), Ben Bernanke.
Durante una conferencia del gremio, Bernanke dijo que las condiciones existentes dificultan que los bancos generen dinero con los críéditos que entregan.
El funcionario manifestó estar consciente de que la actual política monetaria ultra-expansiva de la FED daña la rentabilidad de esas entidades.
Desde hace más de tres años, la FED mantiene las tasas de interíés en mínimos históricos cercanos al cero por ciento, medida que extenderá al menos hasta 2014.
Sin embargo, la pertinencia de prolongar dicha disposición genera criterios encontrados entre las autoridades del sector.
Elevados índices de desempleo, menores perspectivas de expansión y aumento de los precios estarían entre las principales consecuencias si se mantienen las bajas tasas de interíés por un período excesivo, según algunos expertos.
