El presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Ben Bernanke, dijo el martes que era demasiado pronto para declarar la victoria sobre la economía de su país, advirtiendo contra la complacencia en la formulación de políticas mientras se ilumina la perspectiva.
"Aún no hemos llegado al punto donde podemos estar completamente confiados de que estamos en camino a una recuperación total", dijo Bernanke en una entrevista a ABC News.
El presidente de la Fed recibió con beneplácito un descenso en la tasa de desempleo y señales de que las tensiones financieras en la endeudada Europa se estaban aliviando, pero acotó que el desempleo estaba aún problemáticamente alto y el mercado de la vivienda aún díébil.
"Creo que es realmente importante no ser complaciente. Hay mucho camino por recorrer, mucho por hacer, y seguiremos haciíéndolo", dijo Bernanke.
Cuando se le preguntó si la Fed estaba considerando mayores acciones para estimular el crecimiento, Bernanke dijo que el banco central no descartaría opciones. Sin embargo, no sugirió que otra ronda de compra de bonos era inminente.
La Fed ha mantenido las tasas de interíés cercanas a cero desde diciembre del 2008 y ha comprado 2,3 billones de dólares de deuda a travíés de dos programas de compra de bonos para estimular el crecimiento.
En un discurso el lunes, Bernanke había dicho que la economía de Estados Unidos necesitaría crecer más rápido para asegurar un progreso continuo en la reducción de la tasa de desempleo. Esos comentarios llevaron al alza a los precios de las acciones y los inversores apostaron que otra ronda de estímulo monetario podría ofrecerse.
Las acciones subieron el lunes por el optimismo de que los comentarios de Bernanke señalaban que la Fed haría más para bajar los costos del endeudamiento, y los operadores retrasaron las apuestas para una primera alza de tasas de interíés para octubre del 2013, desde su apuesta previa para julio del mismo año hace una semana.
La tasa de desempleo en Estados Unidos ha caído desde un 9,1 por ciento en agosto a un 8,3% el mes pasado, un descenso que funcionarios de la Fed ven que no va de acuerdo con un ritmo de crecimiento aún lento.
El presidente de la Fed de Dallas, Richard Fisher, de la línea dura contra la inflación, concordó el martes en que un mayor crecimiento sería necesario para impulsar el empleo, aunque dejó claro que se opone a la idea de mayor alivio en la política monetaria.
Eric Rosengren, que dirige la Fed de Boston, dijo que el banco central debería expandir más la política monetaria si el crecimiento se desaceleraba más de lo esperado. Ni Fisher ni Rosengren tienen un voto este año en el panel que fija la política monetaria de la Fed.
Despuíés de sus últimas dos reuniones, la Fed dijo que probablemente mantendría la tasa de interíés clave cerca de cero al menos hacia fines del 2014. Bernanke dijo que era una estimación del organismo, no una garantía.
Un acelerado ritmo de creación de empleo -la economía ha creado más de 200.000 puestos trabajos en cada uno de los últimos tres meses- ha alimentado las especulaciones que la Fed podría subir las tasas antes de lo previsto.
En su discurso del lunes y la entrevista del martes, parecía que Bernanke no estaría respaldando esas expectativas.
"Es demasiado temprano como para declarar victoria", dijo Bernanke en una entrevista con ABC News. "Necesitamos ser cautos y asegurar que esto sea sostenible", agregó. (Reporte adicional de Ann Saphir en Choudrant, Louisiana, Jonathan Spicer en Nueva York, David Milliken y Sven Egenter en Londres y Pedro da Costa, Glenn Somerville y Lucia Mutikani en Washington; Escrito por Ann Saphir y Mark Felsenthal)