La pata internacional de ACS le está pasando una costosísima factura bursátil a ACS. La acción del grupo que preside Florentino Píérez está perdiendo un 9,48% esta semana -más del doble que el Ibex- y, salvo sorpresa mayúscula en la sesión de hoy –debería recuperar la píérdida del 16,59% acumulada este año- cerrará su quinto trimestre consecutivo de números rojos en bolsa. No hay precedentes en la ya dilatada historia de la compañía en bolsa. En 12 meses, la caída alcanza ya el 37%, la mayor entre las mayores compañías constructoras europeas.
El 'profit warning' de la australiana Leighton, la australiana participada por la filial de ACS, Hochtief, ha provocado la última vuelta de tuerca en la cotización de la española. Leighton ha rebajado sus expectativas de beneficio neto para 2012 hasta un rango situado entre los 400 y los 450 millones de dólares australianos, frente a una horquilla anterior entre los 600 y los 650 millones. La razón, el incremento de los costes que está erosionando la productividad.
La pregunta está servida: ¿recoge ya la cotización de ACS todo el impacto negativo de sus filiales internacionales o lo peor está por llegar? Renta 4 tiene claro que la noticia es negativa pero cree que el precio de la acción ya “debería tenerlo recogido prácticamente en su totalidad sin descartar cierta presión en el corto plazo. Reiteramos nuestra recomendación de mantener en la constructoraâ€.
La caída libre del valor en el último año y medio desde el máximo de 38,37 euros de octubre de 2010 hasta el mínimo de 19,10 fijado ayer, se ha llevado por delante muchas marcas. Por ejemplo, ACS está cotizando un 47% por debajo de los niveles del septiembre de 2010 cuando lanzó la OPA por el 100% de Hochtief, en una operación financiada en parte con autocartera. La primera inversión de ACS en la alemana se realizó con financiación bancaria.
El desembarco en Alemania se ha convertido en un arma de doble filo para ACS en los últimos meses. Acumula unas millonarias minusvalías latentes desde que adquirió su primer paquete de acciones allá por abril de 2007, cuando ACS cotizaba por encima de los 45 euros.
Ahora, las píérdidas de 160 millones de euros de Hochtief en 2011 –el grupo prevíé volver a los beneficios este año-obligaron al grupo alemán a cancelar el pago de dividendo correspondiente a este ejercicio. No hay mayor damnificado que el grupo español, cuya caja ha dejado de ingresar 80 millones de euros.
La situación del grupo alemán ha obligado a Florentino Píérez a mover ficha y colocar en la cúpula de Hochtief a Marcelino Fernández Verdes, hasta ahora presidente de Dragados y miembro del consejo de supervisión de la alemana.
“Lo extraño es que ACS no tomara está decisión antesâ€, asegura Emilio Rotondo. El analista de Kepler cree que a ACS “le están pesando las incertidumbres, que son muchas. El resultado es que no tiene visibilidad en bolsa. Si se añade el entorno macro, se explica la caídaâ€.
De momento, el arranque de 2012 no ha podido ser más duro.El desplome de ACS en bolsa se suma a la últimas caídas de Hochtief y Leighton, que no obstante mantienen ganancias este año en el parquíé del 6,49% y del 16,39%. Iberdrola , donde ACS controla un 18,8% -construyó la participación a un precio medio de 7,1 euros-, tampoco ayuda a la contabilidad de ACS. La elíéctrica ha caído este año un 13,58% hasta los 4,18 euros, nuevo mínimo de los últimos doce meses.