Una empresa fundada por quien hasta ayer fue ministro de Hacienda de Costa Rica, Fernando Herrero, evadía impuestos sobre la renta, hecho que habría influido en la renuncia del funcionario, informó hoy el diario local La Nación.
La firma Procesos, Investigación y Asesoría CA, fue fundada en 1998 por la experta en ciencias políticas Flor Isabel Rodríguez y su esposo, Fernando Herrero, quien en ese momento ocupaba el cargo de presidente de la junta directiva, indicó el diario.
Según la investigación del medio de comunicación, la declaración de renta de le empresa "refleja omisiones de al menos 50 millones de colones (unos 100.000 dólares al cambio actual) en el reporte de ingresos para el período fiscal 2009-2010".
El rotativo informó que preguntó a Herrero de esta situación mediante correo electrónico hace tres días y que tuvo que solicitar la intervención de la presidenta, Laura Chinchilla, para que el funcionario respondiera.
Herrero respondió escuetamente algunas preguntas en las que reconoció haber sido socio fundador y presidente de la junta directiva de la firma, pero aseguró que traspasó las acciones a su esposa en 2006.
Sin embargo, La Nación informó que no existe registro de un traspaso de acciones.
La investigación tambiíén reveló que la empresa Procesos, Investigación y Asesoría CA recibió contratos por al menos 192.000 dólares del actual Gobierno y del oficialista Partido Liberación Nacional (PLN) entre octubre de 2009 y diciembre de 2011.
Estos contratos fueron adjudicados en 2011 por la Presidencia de la República y la Refinadora Costarricense de Petróleo, y entre 2009 y 2010 por el PLN por servicios de asesoría en comunicación, estudios de opinión, asesorías estratíégicas y manejo de crisis.
Esta situación se une a la políémica en la que se ha visto envuelto Herrero, luego de que La Nación publicara el pasado 26 de marzo que el valor de las propiedades de once ministros, entre ellos íél, estaba sin actualizar desde hace años, por lo que pagaban menos impuestos de lo correspondiente.
Herrero y su esposa, quien trabajaba como asesora de la Casa Presidencial, presentaron su renuncia ayer, la cual fue aceptada por la presidenta Chinchilla, quien se encuentra de viaje en Nueva York.
El exministro de Hacienda fue "la cara" de la reforma tributaria que el Gobierno impulsa y que ya fue aprobada por el Congreso en el primero de dos debates requeridos.
La reforma fiscal pretende una recaudación adicional de unos 600 millones de dólares anuales, equivalentes al 1,5 % del producto interno bruto (PIB) del país, con el fin de paliar el díéficit estimado en un cinco por ciento del PIB para este año.
En este proyecto se sustituye el impuesto de ventas del 13 % por uno al valor agregado del 14 %, que amplía los productos y servicios por los que hay que tributar, y además incluye un nuevo gravamen del dos por ciento para los servicios privados de salud y educación, renta global y modificaciones al impuesto sobre la renta.