Exponiendo una fisura con Israel, el presidente Barack Obama insistió el domingo que Estados Unidos no le ha ``regalado nada'' a Irán en la más reciente ronda de conversaciones sobre el programa nuclear de la república islámica.
Obama dijo que se negó a que las conversaciones caigan en un ``proceso de estancamiento'' y que confía en que todavía hay una oportunidad para la diplomacia.
Horas antes el domingo, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu dijo que Estados Unidos y otras potencias mundiales le dieron a Irán ``un regalo'' al acordar celebrar más conversaciones el mes próximo. Netanyahu dice que eso le da a Teherán más tiempo para continuar enriqueciendo uranio sin restricciones.
Obama desestimó esa noción, diciendo que Estados Unidos y sus socios han sido bien claros con Irán sobre los objetivos de las conversaciones. Los diplomáticos que se reunieron con representantes iraníes el sábado en Estambul calificaron las conversaciones de constructivas y útiles. Ambas partes acordaron celebrar más conversaciones en Bagdad a finales de mayo. ``Al menos hasta ahora no le hemos regalado nada, que no sea la oportunidad para negociar y ver si Irán llega a la mesa de buena fe'', dijo Obama durante una conferencia de prensa en Colombia, mientras terminaba su aistencia a una cumbre diplomática con mandatarios de Amíérica Latina. Sin embargo, Obama advirtió: ``El reloj está corriendo''.
Estados Unidos ha estado tratando de persuadir a Israel para que no lance un ataque contra instalaciones nucleares iraníes, algo que podría resultar en que Estados Unidos sea arrastrado al conflicto tambiíén. Washington insiste en que hay tiempo para que la diplomacia tenga buenos resultados. Irán insiste que su programa nuclear tiene fines pacíficos y que no busca construir una bomba atómica.