Fuerzas militarizadas marroquíes están protegiendo tras dos meses de conflicto la siembra de arroz de la empresa española Mundiriz, filial del grupo alimentario EbroFood y productor de arroz La Cigala, según han explicado a Efe fuentes de Mundiriz.
El despliegue de unos 2.000 agentes de las fuerzas del orden en la región de Larache (norte de Marruecos) se produjo el pasado sábado por la noche, despuíés de casi dos meses de violento conflicto entre Mundiriz y habitantes de dos comunidades limítrofes, que habían ocupado las 2.500 hectáreas que explota la empresa.
Según la Asociación Marroquí de Derechos Humanos (AMDH) en la región, los enfrentamientos de los últimos días se han saldado con cien heridos (15 en estado grave) y 25 detenidos, mientras que las fuentes de Mundiriz aseguran que los heridos son mayormente agentes del orden que durante dos meses, hasta el pasado sábado, tenían órdenes de no cargar.
El pasado sábado, según la AMDH, los 2.000 agentes llegados de refuerzo cargaron con gases lacrimógenos y balas de caucho, protegidos por dos helicópteros, hasta desalojar a los ocupantes.
Hasta el momento, ninguna fuente oficial marroquí ha querido precisar a Efe el número exacto de las fuerzas desplegadas ni cuánto tiempo permanecerán acampados en el lugar protegiendo la siembra del arroz, que lleva ya seis semanas de retraso sobre su calendario habitual.
Por su parte, fuentes diplomáticas españolas confirmaron que la Embajada de España ha pedido al Gobierno marroquí y al propio Gobernador de Larache, Nabil el Jarrubi, su intervención para proteger los intereses de la empresa española, establecida en Larache desde 1998.
Mundiriz se enfrenta desde hace dos meses con los habitantes de las aldeas de Chlihate y Shishate, que han ocupado sus tierras y reclaman su expropiación, además de exigir más puestos de trabajo en la planta de la empresa y protestar por la proliferación de mosquitos.
El presidente de Mundiriz, que produce el 60% del arroz cultivado en Marruecos, Manuel Jurado, explicó que su empresa da empleo a 600 personas (todos marroquíes excepto 5 españoles) y que ha creado un "cordón sanitario" contra los mosquitos de 50 metros alrededor de 12 kilómetros, pero dijo estar convencido de que los que protestan quieren sencillamente "quedarse con las tierras".
La siembra de arroz comenzó solo en la tarde-noche de ayer domingo, protegida por los agentes del orden, que han acampado en la finca para proteger a los sembradores y evitar que sean atacados, como en las pasadas semanas, por los habitantes, quienes han utilizado caballos, cadenas y hondas, según Jurado.
Mundiriz llegó a Marruecos en 1998 y estableció un contrato con las autoridades para explotar en ríégimen de alquiler tierras del Estado, pero los habitantes -sostuvo Jurado- nunca han querido entender que las tierras pertenecen al Estado y no a las comunas cercanas, lo que, según íél, ha provocado todo el conflicto.
El ministerio del Interior marroquí señaló el pasado sábado que los ocupantes habían "interrumpido de forma violenta las labores" en los terrenos de Mundiriz y causado "decenas de heridos" entre las fuerzas del orden, pero no precisó detalles sobre el despliegue de sus agentes.
Estos incidentes en Larache se producen justo cuando está a punto de inaugurarse mañana un Foro de Inversiones para animar a las empresas españolas a invertir en Marruecos