Alemania es el problema de Europa. Al menos así lo cree Kurt Kotzegger, director de inversiones y responsable de sistemas de Raiffeisen Capital Management, la principal gestora de fondos austriaca con más de 29.000 millones de euros de patrimonio, que no quiere oír hablar de bancos europeos, sin excepción. De esta manera, el financiero hace un recorrido por la crisis de deuda europea y explica como sacarle el mayor provecho a las turbulencias que viven los mercados.
P- Sobra decir lo complicado de la situación que viven los mercados europeos ¿Pero hay alguna manera de aprovecharse de las dificultades?
Siempre hay formas de beneficiarse. Si miras al largo plazo hay más clases de activos. En general, nosotros tenemos una cartera de bajo riesgo, pero esto da intereses muy bajos. Estamos en bonos alemanes, bonos del tesoro de EEUU… No tenemos deuda portuguesa o griega, y nuestra exposición a España, Italia y Francia todavía es muy limitada.
P- ¿Bonos franceses tampoco?
Así es. Todos nosotros sabemos cómo ha empezado todo esto. Comenzó en Islandia e Irlanda, luego fue a Grecia, ahora se está moviendo hacia España, sabemos que el próximo va a ser Italia… Pero no sabemos cuán mal se va a poner y, si la situación se vuelve realmente difícil, las decisiones se tomarán en Francia.
Si piensas como debería ser el área monetaria perfecta, y eres objetivo en el sentido de que no tienes preferencias por ningún país, entonces tienes que admitir que el problema es Alemania. Alemania es la que no quiere encajar. Una óptima región monetaria incluye a Italia, España, Portugal y Francia, pero no a Alemania. Por supuesto, por razones políticas no es posible, no podemos imaginarnos a Francia rompiendo con Alemania.
P- Si atendemos a los volúmenes de los mercados nos podemos dar cuenta de que nadie quiere estar en el mercado… ¿Crees que los que están marcando los movimientos son unos pocos especuladores?
Hay que diferenciar entre tipos de activos. En el lado de la renta fija, cuando el mercado se pone nervioso eso ayuda a aumentar la negociación. En la renta variable hemos visto durante muchos años que los volúmenes van hacia abajo… Si miras sólo los volúmenes de negocio el hecho es que los ‘negros toros’ y los ‘oscuros osos’ no hacen operaciones en el mercado de acciones.
No obstante, lo que estamos viendo desde hace un par de meses que el sentimiento bajista ha empezado a hacerse fuerte en los mercados, son muchas operaciones tanto en el mercado de renta fija como en variable y que el cash está cayendo.
P- La explicación preferida que se está dando a las caídas en Europa, especialmente en los países que están en el punto de mira, es que los inversores están castigando a las compañías por su nacionalidad, a pesar de que tienen unos fundamentales sólidos. ¿Serían los mercados tan poco inteligentes de hacer una cosa así?
Los mercados son algo extraño. Me explico. Los mercados son el ruido de muchísimas personas y las personas no somos racionales, somos emocionales, somos ‘tontas’… pero lo más raro de todo es que si las pones a todas juntas, el conjunto es muy racional y lo hemos podido ver en las últimas semanas.
Como inversores de renta variable, tenemos el problema que desde hace dos años hay muchas compañías españolas e italianas que nos gustan y que hemos comprado, con lo que hemos perdido muchísimo dinero simplemente porque el hecho de dónde son.
Por ejemplo, en Italia una de nuestras grandes posiciones desde hace muchos años es Parmalat. Parmalat produce derivados lácteos y todo el mundo necesita la leche. Los italianos mismos consumen mucha leche, con lo que se trata de un valor muy defensivo que, sin embargo, ha caído. Eso es irracional.
No obstante, los mercados empiezan a distinguir. Despuíés del anuncio de los 100.000 millones de euros para el sistema bancario español, los mercados reaccionaron de manera muy diferente. Los activos financieros, tanto en el lado de los bonos corporativos como en el de las acciones, reaccionaron de manera positiva, mientras que la deuda italiana y española continuó de forma negativa.
Esto es así porque la recapitalización no se ha visto como una solución en sí misma, sino como el siguiente paso y los mercados están forzando a los políticos a dar ya el siguiente.
P- ¿Los mercados estarían 'imponiendo' un rescate total de España?
Los mercados simplemente están diciendo que si rescatas a los bancos, no lo hagas de manera que los 100.000 millones pasen a aumentar el riesgo soberano, porque entonces no solucionas nada.
Creo que una de las razones por las que tenemos problemas es porque existe una estrecha relación entre los bancos y la deuda soberana. Es como si tienes dos barcos hundiíéndose y estás achicando agua de uno echándosela al otro. Los mercados simplemente les están diciendo a los políticos que traten de separar los sistemas.
100.000 millones para los bancos españoles es algo bueno y, probablemente sea la cifra correcta. España está en plena corrección y vamos a ver más contracciones en el sector inmobiliario, con más morosidad hipotecaria, con lo que 100.000 millones no es elevada.
P- ¿Y ahora quíé?
Todo el mundo está esperando a la semana que viene, a la cumbre europea, porque hasta ahora las ideas no se han podido llevar a cabo. Hay muchas esperanzas puestas en que en la reunión se encuentre una solución.
P- Pero hemos visto ya demasiadas cumbres y fechas clave. Este mes teníamos una primera cita que eran las elecciones griegas, otra que era del G20 del que tampoco ha salido mucho y ahora otra cumbre europea…
Creo que todo el mundo sabe ya que hay solo dos posibilidades. Es un hecho. Y los dos finales que se puede producir son o una ruptura o una unión fiscal.
P- ¿Eurobonos?
Unión Fiscal en cualquier sentido. La horquilla de posibilidades va desde los eurobonos hasta una unión bancaria o la monitorización del sistema fiscal. Solo dos caminos, ruptura o unión fiscal con todo lo que ello implica. La pregunta es cuánto tiempo va a llevar decidirlo.
P- Parece que en España pensamos que las cosas están mejor de lo que se percibe fuera…
Si España es capaz de separar el sistema financiero de la deuda soberana, entonces el país no necesitará un rescate total. Creo que los inversores internacionales, en general, reconocen que en España se están haciendo las cosas bien. A pesar de ello, la situación que viene es de más dolor.
Así, los españoles lo que teníéis que hacer es preguntaros realmente cual es vuestro papel en Europa. Por ejemplo, respecto al desempleo desde un punto de vista social, no de mercado, lo que está ocurriendo con los jóvenes, donde el paro es muy elevado desde hace mucho tiempo no es aceptable.
Se supone que tiene lo que traer la Unión Europea es el beneficio de todo el mundo y, al mismo tiempo, estamos aceptando que un gran mercado, no una economía pequeña como Grecia, tenga un problema semejante. Es simplemente inaceptable. No podemos decir que la Unión Europea ha triunfado su permitimos que un país tan grande como España tenga estos problemas.
P- Volviendo a la recapitalización de la banca, ¿podemos decir que están pagando justos por pecadores cuando hay bancos como Santander o BBVA que, sin necesitar dinero en principio, están sufriendo el mismo castigo que el resto del sector?
Absolutamente. Pero hay que admitir que los inversores de renta variable somos escíépticos hacia los bancos europeos. Por supuesto hay muchas diferencias entre Bankia y BBVA, pero no nos gustan, en su conjunto, los bancos europeos. Bankia puede acabar siendo el Lehman europeo.
Puede llegar el momento en el que los mercados digan que les da igual un core capital del 7% o del 9%, que quieren un 25%, lo que se podrían considerar a salvo. Por eso nosotros no estamos en este sector.
Nos encontramos en un momento de shock bancario, que no es lo mismo que cuando la gente echa a correr para sacar su dinero. El shock se está produciendo lentamente y eso es realmente un gran peligro. No solo no nos gustan los bancos españoles, sino tampoco los alemanes o los franceses.
P- Para terminar… ¿Unas cuantas compañías europeas que comprarías?
No voy a ser políticamente correcto. Tenemos Repsol desde hace tiempo y nos gusta incluso despuíés de la nacionalización/desastre de YPF. Despuíés de que esto ocurriera lo hemos mantenido.
En general nos gustan las opciones que hay en el sector energíético. BP, British Gas… Y si miras fuera de este, una acción por la que apostamos es la compañía de transportes danesa Moller Maersk. Tiene varios inconvenientes, como que cotiza en Dinamarca y nadie quiere mercado daníés o que el transporte es un sector cíclico y nadie quiere cíclicos europeos. Pero está extremadamente barata y son líderes en una industria que no está muy politizada