El fabricante de electrónica Sharp estudia recortar unos 3.000 puestos de trabajo en su empresa matriz basada en Japón como parte de su plan de reestructuración para enderezar su rendimiento, informó la agencia Kyodo.
Los recortes de personal, que afectarían a casi un 15 por ciento de su plantilla en el país asiático, incluirían un volumen importante de jubilaciones anticipadas, explicó una fuente cercana a la medida a Kyodo.
La noticia se produce dos días despuíés de conocerse que Sharp estudia acometer por primera vez despidos a gran escala en todo el mundo y la venta de oficinas para compensar las píérdidas que espera para el periodo abril-junio.
Se prevíé que la empresa de Osaka registre una píérdida neta de unos 100.000 millones de yenes (1.053 millones de euros) para el trimestre abril-junio, primero del año fiscal 2012 en Japón, sobre todo debido al continuo deterioro de su rama de pantallas de cristal líquido (LCD) y de paneles solares.
A su mal rendimiento tambiíén han contribuido los 150.000 millones de yenes (1.581 millones de euros) que la empresa se ha visto obligada a pagar como compensación a la estadounidense Dell por un escándalo de fijación de precios en el mercado del LCD.
Sharp tiene previsto anunciar sus resultados financieros para el trimestre abril-junio el próximo 2 de agosto.
La compañía registró una píérdida neta ríécord de 376.000 millones de yenes (cerca de 3.965 millones de euros) en el ejercicio 2011, y prevíé perder unos 30.000 millones de yenes (316,29 millones de euros) en el actual año fiscal 2012, aunque esta píérdida podría ser mayor en función de los costes de reestructuración.