Los mercados europeos quieren prolongar la fiesta de Draghi. El plan de compra de bonos anunciado ayer por el presidente del BCE desató la euforia y las Bolsas amanecen hoy todavía con buen sabor de boca. Los futuros se anotan alzas del 0,3%. La prima de riesgo, que ha bajado más 100 puntos básico esta semana, arranca en los 440 enteros. El bono español a 10 años se sitúa por debajo del 6% por primera vez desde mayo.
Los futuros europeos amanecen en verde, aunque muy ligeramente, para extender la euforia de ayer. Se anotan en la preapertura alzas cercanas al 0,3%, despuíés del plan de compra de bonos anunciado por el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, para calmar los mercados de deuda.
La cita del día, con todo, estará en Estados Unidos, donde se conocerán datos del mercado de trabajo que pueden dar una pista de la marcha de la economía norteamericana y que pueden sentar las bases de próximas decisiones por parte de la Reserva Federal. Hoy se dan a conocer las cifras de creación de empleo en agosto y la tasa de desempleo correspondiente al mismo mes. Según los analistas consultados por Reuters, el número de empleos habría crecido 125.000, tras el incremento de 163.000 en julio. Mientras, la tasa de desempleo se habría mantenido en el 8,3%, mismo nivel que en julio.
En el mercado de deuda, la prima de riesgo parte por debajo de los 450 puntos básicos, en los 440. En los primeros compases de la mañana se mantiene estable en torno a dicho nivel. El diferencial del bono español a 10 años con el alemán baja ya más de 100 puntos en la semana, despuíés de que el lunes Mario Draghi dejara claro ante la Eurocámara su intención de salir en auxilio de los páises más vulnerables a la crisis de deuda. La rentabilidad del bono español a 10 años cae del 6% por primera vez desde el pasado mayo.
El presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, anunció ayer en Fráncfort que la autoridad monetaria aprobó un nuevo programa de compra de deuda pública, que va más allá del anterior, pero tambiíén exige condiciones más duras, además de que fuerza a la solicitud por parte del país que lo necesite para reforzar el compromiso. Además, tal y como anticipaban los operadores, el BCE mantuvo invariable el precio del dinero en el 0,75%.
El euro, por su parte, amanece estable en 1,26 dólares.
