Los precios de consumo en la Zona Euro registraron una lectura del 0,4 mensual y del 2,6 interanual durante el pasado mes de julio, según los datos finales publicados hoy por Eurostat, la oficina de estadística de la Unión Europea. El dato ha salido perfectamente en línea con lo esperado por el consenso de mercado. En el mes anterior la lectura fue de un -0,5 y 2,4% respectivamente.
Por su parte, el dato del IPC subyacente, aquel que excluye las partidas más volátiles de los alimentos no elaborados y los productos energíéticos, baja dos díécimas, hasta el 1,7% interanual desde el 1,9% anterior. La previsión apuntaba a esa misma lectura.
Al analizar los principales componentes vemos que las tasas anuales más altas se dieron en: transporte (4,8% vs. 3,2% anterior), alcohol y tabaco (4,5% vs. 4,7%) y vivienda (4,1% vs. 3,8%), y las más bajas en: comunicaciones (-3,1% vs. -3,1%), ocio y cultura (0,8% vs. 1,0%) y educación (1,1% vs. 0,7%).
Entre los Estados miembros de la Zona Euro para los que hay datos disponibles, las tasas anuales más bajas se observaron en Grecia (1,2%) y las más altas se dieron en Estonia (4,2%). Las cuatro grandes economías quedaron en: Alemania (2,2% vs. 1,9% anterior), Francia (2,4% vs. 2,2%), Italia (3,3% vs. 3,6%) y España (2,7% vs. 2,2%). Tambiíén en tasa anual.
Valoración:
A la vista de los anteriores datos podemos ver cómo la inflación interanual en la Zona Euro está comenzando a repuntar tras permanecer durante los anteriores tres últimos meses anclada al 2,4%. El reciente repunte de los precios energíéticos ha frenado la caída del IPC hacia el objetivo del 2% fijado por el BCE, como sería de esperar a la vista de la desaceleración de la demanda. A pesar de ello, la prioridad del BCE debe ser ayudar a evitar que se prolongue la caída de la economía de la Zona Euro, que es especialmente acentuada en la periferia.
Datos que salen en línea con lo esperado por lo que son neutrales para Euro, Bolsas y Bonos.