De 500.000 millones de euros se podría ampliar hasta los dos billones
El plan cuenta con el beneplácito del ministro alemán de Finanzas
Habría que vencer los recelos de otro de los países triple A, Finlandia
Varios medios alemanes aseguran que España negocia un rescate
Los países de la zona euro preparan un incremento de la potencia de fuego del fondo de rescate europeo (MEDE) que multiplique por cuatro su volumen actual. Si hasta ahora se manejaban unas cifras de 500.000 millones de euros, estas se podrían ampliar hasta los dos billones de euros, para así poder rescatar a países como España o Italia, según desvela el semanario alemán 'Der Spiegel'.
El modelo del incremento será tomado del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF), que contempla la entrada de inversores privados, si bien es cierto que hasta la fecha no ha habido capital externo interesado en entrar. Estos planes de ampliación de capital cuentan con el beneplácito del ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schí¤uble, aunque todavía habría que vencer las reticencias de otro de los países de la triple A, Finlandia.
Varios medios alemanes han informado que España está negociando entre bastidores un próximo rescate global con las autoridades de Bruselas que incluye un nuevo paquete de condiciones y el diario británico 'The Guardian' anuncia en su edición de hoy que tanto el presupuesto del rescate a España como las condiciones concretas serán hechos públicos el próximo jueves. Este sería el motivo por el que la ampliación de los fondos del MEDE se está abordando con carácter de urgencia.
Agujero en las cuentas griegas
'Der Spiegel' asegura además que el díéficit de las arcas públicas en Grecia duplica la cifra suministrada por el gobierno de Atenas, según un informe de los inspectores internacionales de la troika que analizan el estado de las reformas pactadas a cambio del rescate financiero.
De acuerdo con la revista, los auditores de la Unión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional han constatado un agujero en el presupuesto de cerca de 20.000 millones de euros, casi el doble de la suma estimada por el gobierno de Antonis Samaras, de 11.500 millones de euros. Si no se cubre ese díéficit en el plazo previsto, no sería transferido a Atenas el próximo tramo del rescate.
Los inspectores de la troika han interrumpido este fin de semana su labor sobre el terreno durante una semana. La Comisión Europea aseguró que esta interrupción no se debía a que se hubieran suscitado problemas y destacó que Grecia ha conseguido importantes avances en el plan de reformas.